BILBAO. Tras compartir, por "intuición fundada", las sospechas del presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, de que existen "tomas e temperatura" entre el Ejecutivo y ETA, recordó que el PSE-EE y Batasuna ya hablaban cuando el PSOE propiciaba la aprobación de la Ley de Partidos.
En una entrevista concedida a RNE, recogida por Europa Press, Erkoreka afirmó que el portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja, "es un hombre que habitualmente está bien informado en todo lo que tiene que ver con los contactos que el Gobierno mantiene con el entorno de la izquierda abertzale".
"Es un hombre que fue ministro de Interior durante mucho tiempo, con un importante ascendiente sobre algunos Cuerpos de Policía. Todos sabemos que sigue manteniendo antenas en la Policía y la Guardia Civil, que le mantiene regularmente informado de lo que ocurre", señaló.
Según apuntó, ésta "es una tesis que sigue manteniendo de modo sistemático durante mucho tiempo y que llegó a su máxima expresión" cuando anunció que tenía "la certeza" que el Gobierno y ETA estaban negociando.
"Como esa certeza que expresaba Mayor Oreja, con todo lo que avala personal e institucionalmente, como hombre que ha sido ministro de Interior y muy bien relacionado con los entornos policiales, como lo que expresaba Mayor Oreja estaba en sintonía con una percepción que nosotros también, como partido político, venimos manifestando durante mucho tiempo, pues lo hice saber así y lo declaré públicamente sin ningún ambage", dijo.
No obstante, recordó que, después, añadió que "el Gobierno le ha desautorizado formalmente, pero en lo material le ha dado la razón, porque lo que venía reivindicando Mayor Oreja, que es la adopción de una serie de medidas que evitaran o que pudieran transmitir a la opinión pública la impresión de que, en el futuro, no tendrán lugar entendimientos con el entorno de la izquierda abertzale, pues inmediatamente el Gobierno las puso en marcha y anunció esas medidas legislativas, reformas en la Ley Electoral que puso en circulación", subrayó.
En este sentido, consideró que "el Gobierno le desautorizó formalmente, diciendo que Mayor Oreja no está al cabo de la calle de lo que ocurre, pero, en el fondo, en lo material, le dio la razón, porque se apresuró a poner en circulación una serie de propuestas legislativas que estaban en sintonía con lo que planteaba Mayor Oreja".
Según precisó, a él no le consta que los puentes entre el PSE-EE y la izquierda abertzale "nunca se rompieron del todo y se siguen manteniendo". "A mí no me consta fehacientemente así, pero tampoco lo dije yo, sino que son declaraciones procedentes de mi partido", añadió.
El portavoz del Grupo Vasco dijo que, no obstante, "en este terreno, tanto como la constancia fehaciente, pesa la intuición fundada y basada en la experiencia de muchos años ya".
"Ustedes recordarán que, durante los meses previos a la declaración de tregua por parte de ETA, del año 2006, el Gobierno negaba rotundamente y todos los miembros del PSOE negaban con toda la contundencia de la que eran capaces, la existencia de contactos con la izquierda abertzale y con ETA, hasta que se produjo la declaración de tregua y, entonces, si se conoció retrospectivamente que los contactos habían tenido lugar y, además, durante muchísimos años, durante cinco o seis años, de modo ininterrumpido y con una intensidad creciente, se dijo así", manifestó.
ÉPOCA DE CONTACTOS PSE-BATASUNA
En esta línea, destacó que, cuando uno "echaba cuentas y se remontaba a cinco o seis años atrás, se daba cuenta" de que era la época de la mayoría absoluta del PP, cuando el PSOE "conjuntamente con el PP estaban apoyando en el Congreso de lo Diputados, nada menos que la Ley de Partidos Políticos".
"O sea, que el PSOE estaba simultáneamente contribuyendo a la aprobación de la Ley de Partidos Políticos en el Congreso de los Diputados y manteniendo ya unos contactos con el entorno de Batasuna y de ETA que, después, desembocaron en la tregua", dijo.
Por ello, se mostró convencido de que "ese tipo de contactos han existido, existen y existirán, discretos, probablemente, poco comprometidos", y señaló que, por lo menos, "eso espera" su partido, que no tengan las conversaciones "contenido de carácter político".
"Pero lo contactos, aunque no sean más que como medidas orientadas a recabar el estado de opinión y tomar la temperatura a ese entorno, los contactos, probablemente, existen. Y no les critico, creo que es obligación de Gobierno mantener ese tipo de relaciones", manifestó.
En cuanto al PNV, aseguró que no tiene "contactos formales y mínimamente serios en este momento" con la izquierda abertzale, aunque reconoció que en Euskadi "todo el mundo se conoce y todo el mundo habla con todo el mundo".
"Y no voy a ocultar que conversaciones informales se producen a todos los niveles entre gentes del PNV y del entorno de la izquierda abertzale, pero un canal de comunicación estable, firme y claro por parte de ambos entornos políticos, en este momento no existen", concluyó.