madrid. El diplomático, Manuel Prado y Colón de Carvajal, falleció en la madrugada del sábado en su domicilio de Sevilla, tras varios años de lucha contra el cáncer. El diplomático llevaba varios días en una situación de extrema gravedad y cuando se produjo el fallecimiento se encontraban sus cinco hijos, los tres primeros nacidos de su matrimonio con Paloma Eulate y los dos últimos de su enlace con Celia García Corona, con la que se casó hace 23 años. Prado será enterrado hoy a las 11:30 de la mañana en el cementerio de San Fernando de la capital sevillana.

Un portavoz de la familia aseguró que durante toda la mañana de ayer recibieron las condolencias de la Casa Real y del Gobierno. Los amigos que han pasado por el tanatorio sevillano han destacado de él la serenidad y la fe religiosa con la que afrontó su enfermedad.

Prado y Colón de Carvajal nació en Quito (Ecuador) el 17 de noviembre de 1931 y se trasladó a España a los siete años, donde desarrolló una intensa carrera en el mundo empresarial.

Hijo de un diplomático chileno, él era el padre del actual presidente de Endesa, Borja Prado. Fue administrador privado del Rey durante más de 20 años y senador por designación Real en junio de 1977. Su actividad empresarial se desarrolló en base a la promoción exterior de la industria siderometalúrgica, de telecomunicación, automóvil y actividades financieras. Así, ocupó la presidencia de Iberia entre 1976 y 1978 y fue presidente ejecutivo y posteriormente consejero de Infeisa. También ostentó la Presidencia del Centro Iberoamericano de Cooperación y de la Comisión del V Centenario en 1981.

Prado y Colón de Carvajal ingresó el 26 de abril de 2004 en la cárcel de Sevilla para cumplir una condena de dos años por el caso Wardbase. Por razones humanitarias se le concedió el segundo grado penitenciario dos meses después. Como responsable de Grand Tibidabo, fue condenado en 2008 por apropiación indebida a tres meses de prisión por la Audiencia Nacional en el caso de la descapitalización de la compañía catalana.

El Tribunal Supremo ya le había condenado a un año de prisión por apropiación indebida en septiembre de 2007 por un desvío de dinero del Grupo Torras.

Al margen de su actividad empresarial, Manuel Prado, que fue reconocido con las Grandes Cruces al Mérito Aeronáutico y al Mérito Naval, presidió Adena-España y fue fundador de la Fundación contra la Drogadicción (FAD).