por una vez, y sin que sirva de precedente, me voy a poner de acuerdo con Vox. Proponen los de Santiago Abascal que los políticos no deberían cobrar sueldos hasta que se conformen los gobiernos. Aparte de que resulta curioso que la propuesta la lance el partido de un político que lleva décadas chupando de la piragua, y de que seguramente la pongan sobre la mesa sabiendo de antemano que no va a prosperar, estoy de acuerdo con esta idea. Mucho mejor, desde luego, que la reforma que quiere impulsar Pedro Sánchez de modificar la ley para permitir la composición de gobiernos sin que sea necesaria mayoría absoluta. Esa ocurrencia del todavía presidente ahonda en su manifiesta incapacidad, y la del resto, de acordar, ceder, negociar. Sin embargo, la idea de Vox sería mucho más efectiva, sin duda alguna. A algunos políticos, lo están demostrando, les da lo mismo abocar a la ciudadanía a otras elecciones cuando se acaban de celebrar unas. Al fin y al cabo, ellos se llevan a casa la morterada mensual y será el erario público, o sea todos nosotros, el que se encargue de sufragar unos nuevos comicios. Probablemente inútiles, además, vista la ineptitud a la hora de ponerse de acuerdo. Otra cosa sería aplazarles el sueldo. Entonces pactarían, claro que sí.