La semana pasada, que tenía gripe y alta fiebre, tuve un sueño, con dos partes que intentaré explicar.
En el Congreso, después de un discurso, el presidente Zapatero se monta en un caballo blanco, precioso, con un látigo en la mano? profiriendo a voz en grito "¡Fuera el sistema financiero! ¡Fuera los bonos basura! ¡Fuera las agencias de rating! ¡Fuera los bancos!" (Pobres bancos que siempre se han dedicado a la caridad). De pronto, me di cuenta que la cara se le había transformado? ¡qué sorpresa! Era la cara de Hugo Chávez.
Por detrás se veía una fila de hombres, bien vestidos, escoltados por la policía. El primero de ellos se parecía mucho al presidente del Santander. En una esquina había un hombre (que si hubiera sido más alto hubiera dicho que era el rey) que gritaba "¿Por qué no te bajas del caballo?" Oía la radio en la lejanía y decía que el presidente Zapatero había nacionalizado la banca. En ese momento me llevé una gran alegría.
Era mi subconsciente que me había traicionado. ¡Albricias! Se cae del caballo. Ahora la cara es de Zapatero, que rápidamente se monta en el caballo, con gran agilidad, y raudo y veloz, emprende la marcha con el látigo y en esta ocasión grita. "¡Hay que reducir el déficit público! ¡Congelar los sueldos! ¡Hay que congelar la pensiones!... ¿ Para qué necesitan éstos tanto dinero? ¡Viva el copago! Están todo el día metidos en urgencias y ambulatorios. Y en primer lugar y sobre todo, ¡hay que inyectar dinero a los bancos y cajas!"
Me despierto hecho un cristo?