1 Uno de sus referentes. El confinamiento y la pandemia en general le han llevado a reconocer una vez más la dedicación de su padre, médico, durante los meses más duros a un ejercicio profesional de mucho riesgo. 

2 Un libro siempre a mano. Es un ávido lector y nunca deja de tener a mano algo para leer. Eso le ocurrió incluso cuando su mujer se puso de parto en junio de 2020: alivió las horas de espera con El enigma de la habitación 622, de Joël Dicker.

3 Enamorado del misterio. Lo oculto y lo inexplicable le atraían desde que era un niño, cuando ya se gastaba todos sus ahorros en comprarse libros y revistas especializadas relacionados con el mundo de los enigmas.

4 Viajes especiales. Sus padres eran muy aficionados a viajar y él les acompañaba casi siempre. Cuando le dejaban tener opinión sobre el recorrido se empeñaba en lugares en los que hubieran ocurrido sucesos inexplicables.

5 Sin lógica.  Le encanta viajar con La nave del misterio de Cuarto milenio. Siempre busca testigos y protagonistas que relatan sucesos que no pueden se explicados con la lógica habitual. 

6 ¿Cautela o credulidad? Asume que ante un hecho insólito él adopta la postura de la cautela. No todos los sucesos inexplicables responden a los mismos patrones y puede haber circunstancias que confundan. Cree en el misterio, pero siempre que pueda documentarlo.

7 Las casas que hablan. En lo que sí cree es que hay muchos hogares que tienen muchas cosas que contar a su inquilinos sobre el pasado. Son para él casas y lugares que hablan. Reconoce que en determinados lugares ha notado la innegable presencia de algún intruso. 

8 Impresionado. Hay un suceso que le causa desasosiego y que relató en su libro Los intrusos. El escenario es una casa palacio de Jerez (Cádiz) que está deshabitada. Sien embargo, los vecinos decían que veían las luces encendidas y a una niña jugando en su interior.

9 Experiencia personal. Recuerda lo que le ocurrió visitando Belchite (Zaragoza), un pueblo fantasmas tras su destrucción en la Guerra Civil. Estando en una iglesia vio una sombra caminando hacia él. No tiene respuesta para lo que sintió. ¿Realidad o mala jugada del cerebro? 

10 Iker Jiménez, su amigo y su mentor. Trabajar con el director y presentador de Cuarto milenio ha sido un sueño. Los libros de Jiménez eran una parte de sus inversiones infantiles. De niño los leía con avidez y fue su mentor cuando decidió que el misterio era una parte fundamental de su vida. Ahora, además del jefe del programa, es su amigo y la persona con la que mejor comparte su curiosidad.