Los aranceles del 25% sobre los camiones medianos y pesados importados a Estados Unidos entraron en vigor este sábado, una medida que afecta especialmente a México, donde se producen principalmente vehículos de tonelaje medio para fabricantes estadounidenses.

A partir de hoy los nuevos impuestos aduaneros se aplican a los camiones que van de la clase 3 a la clase 8, así como a sus componentes relacionados.

La medida, enmarcada en la guerra comercial emprendida por el presidente estadounidense Donald Trump, había sido anunciada varias veces por el propio mandatario, que afirmó en principio que los gravámenes entrarían en vigor en octubre.

Finalmente, a principios del mes pasado Trump confirmó que los aranceles entrarían en vigor el 1 de noviembre.

Aunque el 99% de la producción de los camiones pesados de cuatro de los grandes fabricantes (Daimler Truck North America, International, Paccar y Volvo) se realiza en EE.UU., gran parte de la de camiones medios de Ford, General Motors (GM) y Stellantis, procede de México.

De enero a julio, Estados Unidos importó 32.410 millones de dólares en camiones, autobuses y vehículos especiales de los que casi el 80%, o 25.860 millones de dólares, procedieron de México según datos del Departamento de Comercio de EE.UU.