- Más de dos decenas de palestinos resultaron heridos ayer en el área de la Ciudad Vieja de Jerusalén tras verse envueltos en choques o sufrir agresiones por parte de israelíes, mientras creía la tensión en la urbe por la celebración de una marcha ultranacionalista israelí con motivo del Día de Jerusalén.
“24 personas fueron atendidas” por los equipos médicos de la Media Luna Roja palestina tras sufrir lesiones por caídas, efectos de gas pimienta o de asfixia con gas lacrimógeno, concretó este servicio de emergencias, que detalló que ocho fueron trasladadas al hospital.
Miles de israelíes -muchos de ellos miembros de los grupos de la extrema derecha- celebraron ayer el tradicional Desfile de las Banderas, una polémica marcha que cruza el barrio musulmán del casco antiguo en conmemoración de la fecha en que el Estado judío tomó control de la parte oriental de la urbe, durante la Guerra de los Seis Días de 1967.
Para los israelíes, la jornada de ayer marca “la reunificación” de la ciudad, mientras que los palestinos la consideran el inicio de la ocupación, por lo que ven la marcha como un acto provocativo.
El desfile genera tensiones año tras año, y el pasado 2021 fue el detonante final que llevó al inicio de la escalada bélica entre Israel y las milicias palestinas de Gaza.
En esta ocasión, el grupo islamista Hamás -que mantiene de facto todo el control de Gaza- amenazó varias veces a Israel con tomar represalias militares si “cruzaba la línea roja” durante la marcha, mientras que el Estado judío ha desplegado un amplio dispositivo de seguridad ante ello.
La tensión en la jornada de ayer se hizo patente desde primera hora de la mañana, cuando unos 2.000 israelíes irrumpieron en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, lo que causó choques con palestinos dentro del recinto, tercer lugar más sagrado para el islam y primero para el judaísmo.
Las fricciones iniciadas por la mañana siguieron durante todo el día. Medios locales y usuarios de redes sociales difundieron imágenes de palestinos e israelíes enfrentándose en pequeños choques en las calles de la Ciudad Vieja, donde también se registraron vídeos de israelíes echando gas pimienta a palestinos que se oponían a su presencia.
A su vez, se vieron imágenes de civiles israelíes armados que incluso sacaron sus pistolas en momentos de tensión.
A partir de las 16:00 hora local (14:00 GMT), la marcha de las banderas comenzó finalmente desde varios puntos de Jerusalén Oeste. Una multitud de personas -jóvenes, familias con niños, etc.- se dirigió hacia la Puerta de Damasco -principal acceso al barrio musulmán de la Ciudad Vieja- y entró para ir hacia su destino final, el Muro de las Lamentaciones, principal lugar de culto del judaísmo.
Durante el recorrido, algunos de los congregados agredieron a periodistas que cubrían la marcha e intentaron causar daños en casas palestinas, ante lo que la Policía intervino con métodos de dispersión antidisturbios, según pudo comprobar Efe. Como suele pasar anualmente, también se escucharon insultos y todo tipo de consignas contra los palestinos, entre ellas “muerte a los árabes”.
Decenas de miles de personas tomaron parte en el desfile, según un portavoz policial, que enfatizó que los agentes ibana actuar “con determinación” ante “cualquier intento de alterar el orden público”.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores palestino condenó “enérgicamente” la marcha protagonizada por los israelíes.