- El presidente ruso, Vladímir Putin, avisó ayer de que es “imposible marginar a Rusia”, en alusión a las sanciones por su “operación militar especial” en Ucrania, y recalcó que ningún “gendarme mundial” podrá detener a los países que quieren desarrollar políticas independientes.
“Entendemos las enormes ventajas tecnológicas (...) en las economías desarrolladas. No pensamos renunciar a ellas. Nos quieren sacar un poco de allí, pero en el mundo actual esto es irreal, imposible”, dijo Putin en una intervención telemática en el Foro Económico Euroasiático que se celebra en Biskek.
El jefe del Kremlin subrayó que a un país como Rusia, salvo que ella misma quiera aislarse tras una muralla, “nadie puede marginarlo”. “En los países occidentales están convencidos de que pueden tachar de la política mundial, de la cultura y el deporte a cualquiera que tenga su propio punto de vista y esté dispuesto a defenderlo” señaló.
Putin subrayó que el desprecio de los intereses de otros países en el ámbito de política y la seguridad “conduce al caos y a conmociones económicas”.
Resaltó que en las economías desarrolladas en los últimos 40 años no se habían registrado los actuales niveles de inflación, mientras aumenta el desempleo y “las crisis globales se agravan en ámbitos tan sensibles como el alimentario”. El mandatario indicó que con las sanciones y la prohibiciones tratan de “contener y debilitar” a los países que desarrollan políticas independientes. En este sentido, aseguró que “ningún gendarme mundial podrá detener este proceso global natural”, ya que “no hay fuerzas que alcancen para ello y, finalmente, por los problemas internos, perderán las ganas”.
Putin, que no hizo ninguna alusión directa a su “operación militar especial” en Ucrania, dijo que Rusia ha hecho “lo más necesario” en los ámbitos que garantizan su soberanía. “Seguiremos avanzando”, recalcó el presidente ruso.
Además, el líder ruso se refirió a la salida de empresas extranjeras del mercado ruso por las sanciones occidentales al país por su campaña militar en Ucrania. “Muchos de nuestros socios de Europa, por ejemplo, anunciaron su salida. Si miramos a las (empresas) que se van, puede ser para bien”, afirmó.
Las últimas multinacionales en abandonar el mercado ruso han sido la tienda británica de ropa Marks & Spencer y la cadena de comida rápida McDonald’s, la aseguradora Zúrich o Renault.
Unas mil empresas extranjeras han abandonado el mercado ruso en los tres meses que dura ya la intervención militar rusa en Ucrania, según cálculos de la prensa económica rusa. Solo en Moscú, son más de 300 las compañías extranjeras que han cesado su actividad, según la Alcaldía. Esto ha provocado que, a mediados de mayo, hubiera unos 138.000 ciudadanos rusos que se encuentran actualmente de vacaciones forzosas y otros tantos se vieron obligados a trabajar a tiempo parcial por el impacto de las sanciones occidentales.
Pese a ello, Putin señaló que “todo se está gestionando para adaptarnos de nuevo, no sin pérdidas iniciales, pero el resultado es que sí nos estamos volviendo más fuertes en algunos puntos”.
l Apoyo de Kazajistán. El presidente kazajo, Kasim-Yomart Tokáyev, señaló ayer que ve posible la implementación del ambicioso proyecto “Gran Eurasia”, propuesto hace unos años por Vladímir Putin, que prevé una mayor cooperación de varias economías de países exsoviéticos con la china.
“El megaproyecto de Gran Eurasia merece una discusión detallada. Tarde o temprano lo implementaremos. Y, como dijo Putin, es posible que otros países puedan unirse”, manifestó.