- El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, duplicó ayer sus esfuerzos diplomáticos en favor de la paz con sendas intervenciones telemáticas ante los parlamentos de Japón y Francia y una petición común: que se aumente la presión contra Rusia para forzarle a buscar una solución pacífica. “Me gustaría hacer una pregunta: ¿cómo parar esta guerra? ¿Cómo instaurar la paz en Ucrania? Porque la mayoría de respuestas están en vuestras manos”, dijo a los diputados y senadores franceses.
Zelenski fue recibido y despedido con aplausos en ambos países y en los dos casos reclamó más apoyo a su país la víspera de que se cumpla un mes del inicio de ese conflicto, que en su opinión ha borrado la negociación efectuada desde 2015 en el marco del Cuarteto de Normandía, integrado también por Francia, Alemania y Rusia. “Sabéis muy bien qué pasa, por qué y quién es el culpable. Lo saben incluso quienes agachan la cabeza e intentan hacer dinero en Rusia”, añadió el mandatario ucraniano, que asumió su mandato en mayo de 2019.
En esta guerra contra la libertad, la fraternidad y la igualdad, según dijo emulando el lema de la República Francesa, “para que la libertad no pierda debe estar bien armada” y “el mundo debe apoyarla con sanciones contra el agresor”.
Su reclamo no fue solo militar, sino también diplomático. Francia ejerce este semestre la presidencia de turno del Consejo de la UE, y Zelenski apeló a su peso e influencia en Europa para acelerar la entrada de su país en el bloque comunitario. “Esperamos que bajo la presidencia francesa se tome una decisión única e histórica en favor de la adhesión de Ucrania”, recalcó el presidente, cuyo diálogo con su homólogo francés, Emmanuel Macron, es constante desde que se desencadenó la guerra el 24 de febrero.
Zelenski instó al mundo a no cerrar los ojos ante lo que sucede actualmente en su país: “Tenéis todas las informaciones sobre mujeres violadas por militares rusos, sobre refugiados asesinados en carreteras y sobre periodistas a los que matan sabiendo que son periodistas”, dijo.
Su intervención ante los parlamentarios franceses incluyó una crítica a las empresas que mantienen su actividad en Rusia a pesar de las circunstancias. “Deben abandonar el mercado ruso: Renault, Auchan (Alcampo en España), Leroy Merlin y otras deben dejar de ser los patrocinadores de la maquinaria de guerra rusa”. “Todo el mundo debe recordar que los valores valen más que los beneficios”, sostuvo en ese discurso telemático, que sucede a intervenciones similares en el Parlamento Europeo, y las legislaturas de Canadá, el Reino Unido, Estados Unidos, Alemania e Italia. Zelenski reprochó además que Rusia no respete el derecho internacional y ataque de forma indiscriminada objetivos civiles, desde hospitales hasta escuelas.
Y, ante los parlamentarios japoneses, advirtió de la posibilidad de que Moscú recurra a armas químicas en este conflicto, al haber usado ya la planta nuclear de Chernóbil “como campo de batalla”. “Rusia ha convertido unas instalaciones nucleares accidentadas en zona de guerra. Imaginen cuánto tiempo llevará el proceso para limpiar el área”, dijo sobre la toma por parte de tropas rusas de la central que fue en 1986 escenario del peor accidente atómico de la historia, seguido por la crisis de Fukushima en 2011.
Su discurso ante la Cámara nipona también hizo referencia a “informaciones” que apuntan a posibles ataques con gas sarín por parte rusa y señaló que “miles de personas” han muerto ya en Ucrania, entre ellas 121 niños.
Arma química. Fuentes ucranianas denunciaron ayer que el ejército ruso empleó fósforo blanco, una arma química ilegal según la Convención de Armas Químicas de 1997, cerca de Irpin y de Hostomel, en el área metropolitana de Kiev. “Ayer, 22 de marzo, tarde por la noche, los invasores rusos utilizaron fósforo prohibido en los suburbios noroccidentales de Kiev,“ dijo el alcalde de Irpin, Oleksandr Markushyn.