- El retraso del informe sobre el escándalo de las fiestas en Downing Street durante la pandemia ha dado un momentáneo respiro al primer ministro británico, Boris Johnson, que lucha por recuperar el control de la agenda política dando visibilidad a su respuesta a la crisis en Ucrania.

Para ello, Boris Johnson pondrá sobre la mesa “la mayor oferta posible” para sumar a las operaciones de la Alianza Atlántica cazas, buques de guerra y “especialistas militares” del Ejército británico, detalló en un comunicado Downing Street, su despacho oficial.

“He ordenado a nuestras Fuerzas Armadas que se preparen para desplegarse en Europa la próxima semana, a fin de asegurarnos que estamos preparados para respaldar a nuestros aliados de la OTAN por tierra, mar y aire”, dijo Johnson.

Representantes del Ejecutivo británico viajarán en los próximos días a Bruselas para finalizar con los socios de la OTAN los detalles del “posible envío” de tropas, puntualizó Downing Street, mientras que el gabinete del Ejecutivo analizará el lunes las “opciones militares” sobre la mesa.

Si el presidente ruso, Vladímir Putin, “elige un camino de derramamiento de sangre y destrucción, será una tragedia para Europa”, pero “Ucrania debe ser libre para decidir su futuro”, apuntó Johnson.

Los planes de Londres pasan por duplicar el número de tropas que mantiene actualmente en la región y enviar más “armamento defensivo” a Ucrania. El Reino Unido cuenta por ahora con más de 900 miembros de su personal militar en Estonia, más de un centenar en Ucrania, así como un escuadrón de 150 efectivos en Polonia.