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Disturbios en Kazajistán por el alza del precio del gas

Las autoridades decretan el estado de emergencia ante las protestas violentas

- Las autoridades de Kazajistán extendieron ayer el estado de emergencia a todo el territorio nacional tras el incremento de los disturbios en Almaty y otras ciudades. El presidente del país, Kasim-Yomart Tokáyev, aseguró que se produjeron “varios muertos y heridos” durante las revueltas, aunque sin dar una cifra exacta. Una turba de manifestantes trató de irrumpir en el Ayuntamiento de Almaty y la residencia del presidente en unas protestas provocadas por el alza del precio del gas licuado.

Las protestas se desataron el pasado 2 de enero tras el incremento del precio del gas licuado, principal combustible automotriz del país, que pasó de valer 60 tenge por litro (0,14 dólares) a valer 120 tenge por litro (0,28 dólares).

Las reclamaciones inicialmente económicas de las protestas han derivado paulatinamente en políticas, con la principal exigencia de poner fin al “régimen de Nazarbáyev”, a quien acusan de todavía mantener el poder político en Kazajistán a la sombra del actual mandatario, para quien las manifestaciones constituyen una “conspiración” y se basan en un “complot” para desestabilizar el país.

Muchos kazajos consideran a Nazarbáyev un obstáculo para los cambios y le vinculan a la actual crisis. Le acusan de estar ligado por lazos familiares a los representantes de las principales empresas petrolíferas del país, responsables de la subida brusca de los precios.