- Decenas de afganos protestaron ayer en Kabul para reivindicar los derechos de las mujeres y la formación de un Gobierno inclusivo, después de que los talibanes evitaran hablar de la educación y el trabajo femenino en un decreto especial. Los manifestantes reclamaron la “igualdad para todos los afganos” y que se permita a las mujeres tener acceso a la educación y el trabajo, señaló a Efe Mohammad Sabir Insaan Dost, profesor universitario y uno de los organizadores de la protesta.
Shela Insaan Dost, otra de las manifestantes, denunció en declaraciones recogidas por la televisión local Tolo que los talibanes “otorgan derechos a las mujeres de forma selectiva según sus intereses”.
Hombres y mujeres participaron en la manifestación, a pesar de la represión de las protestas impuesta por los talibanes desde que llegaron al poder el pasado 15 de agosto.
La protesta llegó después de que los fundamentalistas publicasen, el pasado viernes, un decreto especial sobre los derechos de las mujeres que se limitó a aspectos básicos.
El documento no hacía ninguna mención a los derechos a la educación y el trabajo de las mujeres, a pesar de los repetidos llamamientos de las afganas y de la comunidad internacional.
El régimen fundamentalista ha insistido desde su llegada al poder que las mujeres podrán volver en un futuro a sus puestos de trabajo o a la escuela, pero antes deberá crearse un marco para que se dé ese paso dentro de los límites que marca la sharía o ley islámica. Por ahora ese avance se ha dado únicamente en ciertos sectores, como el de la educación primaria o del trabajo en la salud, mientras el resto de mujeres permanecen a la espera de una decisión.
Dost señaló además que “los talibanes deberían aceptar el llamamiento de la comunidad internacional, los políticos y la oposición y crear un Gobierno inclusivo para poner fin a la guerra”.
La comunidad internacional ha insistido en repetidas ocasiones en la necesidad de contar con un gobierno inclusivo en Afganistán, y se ha resistido por el momento a reconocer oficialmente el régimen de los talibanes. Los fundamentalistas han formado un Ejecutivo copado por religiosos y miembros de su organización, de la mayoritaria etnia pastún, sin representación apenas de otras comunidades ni con presencia de mujeres.