- El Reino Unido y los Estados Unidos adoptaron ayer sanciones contra altos cargos de Nicaragua por su papel en la represión y otras irregularidades cometidas en las elecciones presidenciales del 7 de noviembre.
Por lo que respecta al Reino Unido, se sancionó a ocho altos cargos del Estado nicaragüense, entre ellos la vicepresidenta, Rosario Murillo. Además de Murillo -esposa del presidente Daniel Ortega-, fueron penalizados el presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras; la presidenta de la Corte Suprema de Justicia, Alba Luz Ramos; el secretario general de la Alcaldía de Managua, Fidel Antonio Moreno; Ana Julia Guido Ochoa, fiscal general de Nicaragua; el exvicepresidente y presidente interino y actual magistrado del Consejo Electoral Supremo, Lumberto Ignacio Campbell; el comisario de la Policía Juan Antonio Valle y el comisario jefe de la Policía de León, Fidel de Jesús Domínguez. Los sancionados tendrán prohibida la entrada al Reino Unido y será congelados sus activos en este país.
La secretaria de Estado británica para Europa y las Américas, Wendy Morton, dijo que “el régimen de Ortega está negando a las personas sus derechos fundamentales”. Morton precisó que la inclusión de Murillo se debe a que estuvo implicada en la represión de las manifestaciones.
Por lo que respecta a Estados Unidos, el Departamento del Tesoro impuso ayer sanciones contra el Ministerio Público de Nicaragua, así como a nueve altos cargos nicaragüenses, por su papel en la “represión contra los derechos humanos y las libertades fundamentales” tras la “farsa” de elecciones presidenciales. Entre los sancionados figuran el ministro de Energía y Minas, Salvador Mansell Castrillo; el superintendente de Bancos e Instituciones financieras, Luis Ángel Montenegro Espinoza; y el viceministro de Finanzas y Crédito Público, Adrián Chavarría Montenegro.