Al menos 33 personas, 22 de ellas civiles, resultaron heridas este lunes después de que un atacante suicida al volante de un camión cargado de explosivos se inmoló cerca de varios edificios gubernamentales en el sur de Afganistán.
El atentado tuvo lugar hacia las 10.30 hora local (6.00 GMT) cerca de la Jefatura de Policía del distrito de Daman y la oficina del gobernador del distrito en la provincia de Kandahar, dijo a Efe el portavoz del gobernador provincial, Bahir Ahmadi.
"En la potente explosión, 33 personas, en su mayoría civiles, resultaron heridas. No se han reportado muertos en este ataque", indicó.
Según Ahmadi, entre los heridos hay 11 miembros de las fuerzas de seguridad, 15 residentes de las viviendas cercanas, y siete empleados administrativos de la oficina del gobernador del distrito.
La fuerte deflagración causó además significativos daños a los edificios de la sede de la policía y la oficina del gobernador de distrito, añadió el portavoz, que precisó que "todos los heridos ya han sido trasladados a hospitales y, a excepción de uno de ellos, la mayoría se encuentran en condición estable".
Ahmadi acusó a los talibanes de haber cometido el ataque, aunque los insurgentes no se han pronunciado todavía sobre el incidente.
En los últimos dos meses, Kandahar ha sido testigo de intensos combates en los distritos del norte y oeste fronterizos con las provincias de Helmand y Uruzgan.
En estos ataques, cientos de combatientes talibanes resultaron muertos o heridos.
Estos combates se producen a pesar de que los talibanes y el Gobierno afgano iniciaron el pasado 12 de septiembre en Catar las conversaciones de paz que buscan poner fin de manera dialogada a casi dos décadas de guerra en Afganistán.