- Miles de personas se concentraron ayer por segundo día consecutivo en la plaza de los Mártires, en el centro de Beirut, en protesta por la explosión que el martes devastó una parte de la capital libanesa y se enfrentaron con las fuerzas de seguridad en los alrededores del Parlamento, contra el que arrojaron piedras. Los agentes emplearon gases lacrimógenos contra los manifestantes.
En un tuit, las Fuerzas de Seguridad Interior advirtieron de que “no aceptarán” que sus miembros se vean expuestos al “aumento de los disturbios y los ataques continuados”. El sábado, miles de personas se manifestaron en Beirut, unas protestas que degeneraron en enfrentamientos con la Policía, con un saldo de 250 heridos, según la Cruz Roja Libanesa. El organismo de auxilio precisó ayer que 65 personas tuvieron que ser trasladadas a hospitales y 185 fueron tratadas in situ. Además, murió un agente de seguridad. El sábado por la noche grupos de manifestantes lograron irrumpir en cuatro ministerios y en la sede de la Asociación de Bancos y en algunos edificios se registraron saqueos e incendios.
Entretanto, ayer por la tarde el ministro libanés de Medio Ambiente, Damianos Qattar, se convertía en el segundo ministro en presentar su dimisión, horas después de que lo hiciera la ministra de Información, Manal Abdel Samad. Según el portal de noticias Naharnet, la ministra de Defensa, Zeina Akar; el ministro del Interior, Mohammed Fahmi y el ministro de Economía y Finanzas, Ghazi Wazni, podrían presentar su dimisión en las próximas horas. Fuentes de An Nahar, el periódico árabe de mayor tirada del país, publicó que la sesión de control que celebrará el Parlamento este jueves podría ser el fin de las aspiraciones del primer ministro, Hasan Diab, de celebrar elecciones anticipadas, como prometió el sábado para aplacar a la población. Las mismas fuentes no descartan que el Ejecutivo en pleno pueda dimitir antes para ahorrarse la sesión parlamentaria.