Washington - El Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes de Estados Unidos publicó ayer un polémico informe republicano que acusa a altos funcionarios del FBI y el Departamento de Justicia de abusar de su poder y mostrar sesgo contra el presidente, Donald Trump. Después de que Trump diera luz verde a la divulgación del informe sin ningún pasaje censurado, los republicanos de ese comité publicaron el documento, de tres páginas y media, en la página web de la Cámara de Representantes. El memorando alega que el FBI ignoró el “claro sesgo” a favor de los demócratas de una de sus fuentes, Christopher Steele, un exespía británico que escribió un famoso dossier lleno de detalles sórdidos sobre Trump. El FBI utilizó la información que le había proporcionado Steele para ampliar sus actividades de vigilancia sobre Carter Page, que hasta septiembre de 2016 asesoró en política exterior a la campaña electoral de Trump, por sospechar que actuó como agente ruso.

Entre octubre de 2016 y una fecha no especificada en 2017, hubo varias solicitudes judiciales para vigilar a Page, que fueron aprobadas por el entonces director del FBI, James Comey, y su número dos, Andrew McCabe, además de por altos cargos del Departamento de Justicia (los exfuncionarios Sally Yates y Dana Boente y el actual vicefiscal general, Rod Rosenstein). Esas solicitudes se enviaron a un tribunal secreto establecido para implementar la ley de Vigilancia de Inteligencia Exterior (FISA) y conocido como Corte FISA.

Pero, según el informe, el FBI y el Departamento de Justicia ocultaron en esas solicitudes los lazos financieros con el Partido Demócrata de Steele, que de acuerdo con el documento llegó a admitir que estaba “desesperado porque Donald Trump no resultara elegido” en las elecciones de 2016. “La solicitud a la corte FISA (...) ignoró u ocultó las motivaciones financieras e ideológicas de Steele en contra de Trump”, señala el memorando, redactado por el equipo del congresista republicano Devin Nunes, un aliado del presidente estadounidense y que está acusado de manipular dicho informe.

El memorando se publicó pese a las objeciones públicas del FBI y la oposición demócrata ha advertido de que Trump puede usarlo para desacreditar la investigación sobre la trama rusa y despedir al número dos del Departamento de Justicia, Rosenstein, y más tarde al fiscal especial encargado de la pesquisa, Robert Mueller.

Trump no descartó ayer que pueda despedir a Rosenstein, y respondió a una pregunta sobre el tema de los periodistas: “Deduzcan ustedes lo que va a pasar”.

respuesta de los agentes del FBI La Asociación de Agentes del FBI aseguró ayer que “no permitirán” que “políticas partidistas” les distraigan de su compromiso con Estados Unidos, tras la publicación, por parte del Congreso, del polémico informe sobre la trama rusa. “Los Agentes Especiales del FBI no han permitido ni permitirán que las políticas partidistas nos distraigan de nuestro compromiso solemne con nuestra misión”, señaló en un comunicado el presidente de la asociación, Tom O’Connor.

O’Connor indicó que los estadounidenses deben saber que siguen siendo “bien atendidos” por el FBI, que calificó como la agencia de cumplimiento de la ley “más importante del mundo”. “Los hombres y mujeres del FBI arriesgan sus vidas todos los días en la lucha contra terroristas y criminales por su dedicación a nuestro país y la Constitución”, puntualizó el presidente. La misma asociación mostró este jueves apoyo al director del FBI, Christopher Wray, después de que Trump anunciara su intención de publicar el controvertido documento, a pesar de las advertencias de la agencia federal.

Por su parte, el movimiento que busca someter a Donald Trump, a un juicio político criticó ayer la decisión del Partido Republicano de difundir un polémico informe. El líder de la plataforma, el multimillonario Tom Steyer, afirmó que los conservadores han tocado “un nuevo fondo” al publicar el memorándum que detalla los presuntos excesos de los investigadores. El informe acusa a altos funcionarios del FBI y el Departamento de Justicia de abusar de su poder y de ocultar o incluso compartir el sesgo de una de sus fuentes contra Trump.

“Publicando un documento desacreditado que distorsiona la realidad y alega malas prácticas por parte del vicefiscal general, el FBI y el Departamento de Justicia no es solo irresponsable, sino que daña a quienes intentan llegar al núcleo de la interferencia rusa en las elecciones de 2016 y protegen nuestra democracia”, explicó Steyer. En este sentido, el líder del movimiento señaló que “el liderazgo del Partido Republicano ha tocado un nuevo fondo”, según un comunicado de la asociación.

Steyer también subrayó que esta decisión “es más que una distracción”, pues “es un evidente intento de desacreditar al fiscal especial Robert Mueller” -que investiga la supuesta interferencia del Kremlin en los comicios presidenciales- “con teorías conspiranoicas infundadas”.

También aseguró que los estadounidenses deberían estar “profundamente alarmados” por que los republicanos se hayan involucrado “activamente” en la “sucia campaña contra las agencias judiciales y de inteligencia cuando la investigación cerca a Trump”. “El presidente y aquellos cercanos a él saben que los muros se están cerrando y harán todo lo necesario para protegerse, incluso aunque eso signifique atacar a la fundación de nuestra democracia”, enfatizó en el escrito.

Steyer pidió a los legisladores republicanos que “actúen inmediatamente para sacar de la Presidencia a este mandatario peligroso”. El activista multimillonario lanzó en octubre de 2017 un movimiento llamado Necesidad de un juicio político. - Efe