Bruselas - Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) abordaron ayer con el secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, su trabajo conjunto ante retos como el terrorismo instigado por el Estado Islámico, la influencia de Irán para la seguridad de la región o la amenaza nuclear de Corea del Norte. “Nuestra asociación, como todos saben, es duradera, basada en valores y objetivos compartidos en cuanto a seguridad y prosperidad a ambos lados del Atlántico”, enfatizó Tillerson en una declaración a la prensa sin posibilidad de preguntas que ofreció junto a la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini.

Tillerson enfatizó el “fuerte compromiso que Estados Unidos tiene con la alianza europea, el importante papel que juega en nuestros objetivos de seguridad compartidos”.

Tras una sesión de trabajo bilateral con Mogherini, participó en un almuerzo de trabajo con los ministros de los Veintiocho en el que repasó los principales desafíos a los que se enfrentan en el panorama internacional, como la “amenaza” iraní, en palabras del secretario de Estado.

Lamentó el “efecto desestabilizador” que el comportamiento de Teherán entraña para la región, especialmente por su apoyo a los hutíes en Yemen o a milicias progubernamentales en Siria. “Tenemos la intención de tomar medidas para asegurarnos de que Irán entiende que esto no nos parece aceptable y estamos deseando trabajar con los socios europeos en ese sentido”, indicó Tillerson.

Mogherini reconoció que hay “asuntos que deberíamos discutir y afrontar juntos”, pero que en todo caso “no están en el alcance del acuerdo nuclear y tendremos que abordarlos fuera de ese acuerdo”.

“La UE está deseando trabajar estrechamente con Estados Unidos en estos asuntos, sobre la base de que Estados Unidos siga aplicando el acuerdo nuclear”, advirtió.

Así, la política italiana reafirmó la visión de la UE de que hay que mantener el acuerdo nuclear entre seis potencias internacionales (EE.UU., China, Rusia, Francia, el Reino Unido y Alemania) e Irán, muy criticado por Washington pero que consideró “una prioridad estratégica clave para la seguridad regional y global”. Sobre el conflicto en Siria, Mogherini dijo que coincidieron en la urgencia de avanzar hacia un proceso negociado de transición política basado en las conversaciones de paz de Ginebra y la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU.

Tillerson dejó claro que “nuestros objetivos compartidos para derrotar al EI son importantes”, pero no sólo para vencerlo en Irak y Siria, “sino a nivel global”, señaló. - Efe