Washington - Estados Unidos dijo ayer que “si a Siria le importara tanto el aire, no gasearía a su propia gente”, después de que la adhesión de Damasco al Acuerdo de París sobre el cambio climático haya dejado al país norteamericano como el único del mundo que se desmarca del pacto. “Si a Siria le importara tanto lo que se pone en el aire, no gasearía a su propia gente”, afirmó la portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Heather Nauert, en una rueda de prensa. “Si a Siria le importa tanto el medioambiente, dejaría de gasear a civiles inocentes, incluidos mujeres y niños”, insistió.
Esta fue su reacción después de que un periodista le preguntara por el hecho de que ayer Estados Unidos se haya quedado como el único país del mundo que no quiere estar en el Acuerdo de París sobre el cambio climático, tras el anuncio de la adhesión siria. En su rifirrafe con el periodista, dijo además: “si alguien quiere hacer algún tipo de equivalencia moral entre Siria y Estados Unidos, eso es irrisorio y simplemente no voy a entrar en eso”.
Siria anunció ayer su intención de adherirse al Acuerdo de París sobre el cambio climático, según señalaron sus representantes en la cumbre del clima de Naciones Unidas (COP23) inaugurada este lunes en Bonn (Alemania), informa el semanario Der Spiegel. Si Siria firma ese acuerdo, y después de la adhesión anunciada por Nicaragua el pasado 23 de octubre, Estados Unidos sería el único país que no quiere formar parte del acuerdo climático. La salida de Estados Unidos anunciada por su presidente, Donald Trump, para la fecha más próxima posible, se haría efectiva a finales de 2020. Siria no tenía capacidad hace dos años de firmar el acuerdo cuando éste fue aprobado en París. La guerracontra el yihadismo en la que todavía está sumido el país y las sanciones de la ONU dificultaron al Gobierno sirio participar en la cumbre en diciembre de 2015 en la capital francesa. La cumbre climática de Bonn, que concluirá el próximo 17 de noviembre, tiene entre otros objetivos abordar aspectos concretos de la implementación del Acuerdo. - Efe