Caracas - Al menos diez personas murieron el jueves por la noche al participar en un saqueo en una panadería de la parroquia popular El Valle, en el oeste de Caracas, informaron ayer medios locales que aseguran que ocho personas fallecieron electrocutadas y dos por disparos de bala. Efe constató en el lugar de los hechos que funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas venezolano llegaron a la panadería para levantar los cuerpos.

Según algunos medios, los ocho electrocutados lo habrían sido por un cerco eléctrico para impedir robos y saqueos del que disponía el establecimiento, aunque otros indican que un cable de alta tensión se desprendió cuando los saqueadores intentaban entrar al local. Las protestas antigubernamentales en Venezuela y la respuesta de las fuerzas de seguridad prosiguieron el jueves, en especial en Caracas, donde en el barrio de El Valle bandas armadas atacaron con gases lacrimógenos un hospital infantil, según denunció la canciller Delcy Rodríguez. Cerca de la medianoche “bandas armadas contratadas por la oposición” atacaron con gases lacrimógenos un hospital materno infantil en la zona caraqueña de El Valle, donde se registraban enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, aseguró la canciller venezolana.

Según medios venezolanos, se produjo una manifestación con cacerolazos en El Valle y, cuando la Policía intentó dispersar con gases lacrimógenos a los opositores, estos entraron en el hospital infantil Comandante Supremo Hugo Rafael Chávez Frías. A consecuencia de los altercados, 52 pacientes, entre madres y niños resultaron intoxicados y 18 de ellos trasladados a otros centros asistenciales, añadieron. “Denuncio ante la comunidad internacional que bandas armadas contratadas por la oposición atacaron un hospital materno infantil con 54 niños”, escribió en su cuenta de Twitter la canciller. Rodríguez no dio más detalles de lo sucedido, aunque añadió en otro mensaje que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, “ha dado instrucción de evacuar el hospital para resguardar a los niños y recién nacidos”. El Gobierno venezolano difundió imágenes de los pasillos del hospital regados con las piedras lanzadas por los grupos violentos. Sin embargo, el diputado opositor José Manuel Olivares aseguró en la misma red social: “Niños del Hospital Materno Infantil Hugo Chavez de El Valle muy afectados por las Bombas lacrimógenas que lanza la GNB (Guardia nacional Bolivariana)”.

El también parlamentario opositor José Guerra, representante del circuito electoral que integra a esa zona de Caracas, alertó “sobre intentos de saqueos en El Valle y otros sitios” de la capital. “No comparto esa forma de lucha. Lo que queda es desolación”, expresó Guerra, quien en otro mensaje rechazó “la represión a vecinos de Longaray en el Valle al lanzar la Policía Nacional Bolivariana (PNB) bombas hacia los edificios que afectan a las personas”.

Otros enfrentamientos entre grupos de manifestantes y fuerzas de seguridad se registraban también pasada la medianoche en otras zonas de Caracas, como el Paraíso (oeste) y la Urbina (este). La oposición había convocado nuevas marchas en todo el país que no congregaron a tantas personas como las que hubo un día antes cuando las calles de Caracas se vieron colmadas de manifestantes que fueron repelidos en varios puntos por las fuerzas de seguridad del Estado.

Tras la jornada de protestas, la oposición reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) convocó manifestaciones diarias hasta el lunes, aunque con modalidades distintas a la marcha. El primer vicepresidente del Parlamento, Freddy Guevara, dijo que los ciudadanos deben organizar en sus respectivos barrios y urbanizaciones protestas pacíficas de lucha no violenta con el fin de fortalecer la “organización para la protesta y la resistencia”. Hoy están previstas “marchas de silencio” hasta las diferentes sedes de la Conferencia Episcopal de Venezuela para honrar a los fallecidos. - Efe