Bruselas - El Consejo Europeo celebrará una sesión extraordinaria sin el Reino Unido el próximo 29 de abril para adoptar las directrices de la negociación de la salida de ese país de la Unión Europea (UE), informó ayer el presidente de esa institución, Donald Tusk. “Convocaré un Consejo Europeo el sábado 29 de abril para adoptar las directrices de las conversaciones del Brexit, indicó ayer Tusk en una declaración ante la prensa junto al primer ministro de Japón, Shinzo Abe, y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.

De este modo, los 27 líderes de la UE se reunirán para aprobar las bases de la negociación del Brexit un mes después de la activación oficial por parte de Londres del artículo 50 del Tratado de Lisboa, que la primera ministra británica, Theresa May, indicó el lunes que se producirá el próximo 29 de marzo.

El político polaco destacó que, “personalmente, desearía que el Reino Unido no hubiera escogido marcharse de la UE. Pero la mayoría de los votantes británicos lo decidieron de otro modo”. “Así, debemos hacer todo lo que podamos para que el proceso de divorcio sea lo menos doloroso posible para la UE”, puntualizó Tusk, en una declaración a cuyo término no hubo posibilidad de preguntas.

Según dijo, “nuestra principal prioridad para las negociaciones debe ser crear toda la certidumbre y claridad posible para todos los ciudadanos, empresas y Estados miembros que se vean afectados negativamente por el ‘brexit’, así como nuestros importantes socios y amigos en todo el mundo, como Japón”.

La Comisión Europea aseguró el lunes que “todo está preparado” para la activación del artículo 50 sobre la salida de un Estado miembro de la Unión, un proceso que durará hasta dos años pero que puede ser ampliado por unanimidad de los países.

Tras la adopción de las directrices de la negociación por parte de los líderes, la Comisión deberá emitir una recomendación para abrir las negociaciones que tendrá que adoptar el Consejo.

Expectantes ante la carta Por su parte, la primera ministra británica, Theresa May, comunicó ayer a su gabinete que la carta con la que notificará a Bruselas el inicio del Brexit marcará el “tono” de la “nueva relación” del Reino Unido con la Unión Europea. Según detalló un portavoz de Downing Street, despacho oficial de May, la primera ministra calificó ese documento en la reunión con su equipo de Gobierno como “uno de los más importantes en la historia reciente” del país.

Ese “acontecimiento histórico” dará inicio a un “nuevo y brillante capítulo del Reino Unido como una nación próspera, abierta y global”, dijo el portavoz de May.

Los comentarios de Downing Street se produjeron poco después de que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, anunciara una sesión extraordinaria de esa institución el mismo 29 de abril, sin el Reino Unido, para establecer las directrices de las futuras negociaciones.

Downing Street espera que la salida del club europeo sea “suave y ordenada”, a fin de minimizar la incertidumbre para los individuos y las empresas británicas.

El periodo de dos años permitirá al Gobierno británico acometer las “preparaciones” necesarias para hacer que “un Reino Unido independiente prospere fuera de la Unión Europea”, afirmó el portavoz de la primera ministra.

Mientras, un informe presentado ayer en el Parlamento Europeo concluye que los derechos de los que han gozado los ciudadanos de Reino Unido por tener la ciudadanía comunitaria no son “derechos adquiridos” y por tanto se extinguirán con la salida de su país de los tratados de la Unión Europea. Derechos como el de libre circulación dejarán de poder ser disfrutados por los ciudadanos británicos como consecuencia del Brexit. - Efe