Buenos aires - A punto de que se cumplan dos años de que el fiscal argentino Alberto Nisman apareciese muerto en su casa con un disparo en la sien, la Justicia argentina comenzó a estudiar si reabre la denuncia que presentó contra la entonces presidenta Cristina Fernández por presunto encubrimiento de terroristas.
La Cámara de Casación Penal argentina celebró ayer una audiencia en la que escuchó los argumentos de las defensas del excanciller Héctor Timerman y del diputado kirchnerista Andrés Larroque, también acusados por Nisman, así como los de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA).
Durante la cita, que duró alrededor de una hora y media, la DAIA volvió a insistir en la necesidad de reabrir la denuncia por la trascendencia de su contenido, mientras que las defensas de Timerman y Larroque argumentaron que la causa ya fue archivada.
A partir de ayer, la Sala I del tribunal tiene 20 días hábiles para definir si se vuelve a impulsar el expediente, desestimado por falta de pruebas en mayo de 2015.
Este proceso arranca cuando están cerca de cumplirse dos años de la muerte del fiscal, hallado en su casa con un disparo en la sien en circunstancias aún por esclarecer el 18 de enero de 2015. Cuatro días antes, Nisman había presentado una denuncia contra la entonces presidenta (2007-2015) y varios de sus colaboradores por presunto encubrimiento a los iraníes acusados de haber planificado el atentado contra la mutua judía AMIA, que dejó 85 muertos en Buenos Aires en 1994. Aunque no participó en la audiencia, el abogado Manuel Romero Victorica, que representa a las hijas del fiscal en la causa que investiga su fallecimiento, estuvo este lunes presente entre el público para mostrar su apoyo a la querella. Hizo hincapié en que la denuncia de Nisman “corresponde ser investigada y abierta con independencia de los resultados que dé” porque, a su juicio, “fue la causa por la que el fiscal fue asesinado” y “nunca se hizo ni una sola medida para determinar la veracidad o no” de las pruebas. - Efe