París - El Parlamento francés ofreció ayer, con 305 votos a favor, 239 en contra y diez abstenciones, su confianza al nuevo primer ministro, Bernard Cazeneuve, que prometió centrarse en la lucha contra el paro y la protección de los ciudadanos frente a la amenaza terrorista.

El jefe de Gobierno, que asumió el cargo el pasado día 6, añadió que el cumplimiento de los compromisos adquiridos y la preparación del país de cara al futuro marcarán su acción en los últimos cinco meses de mandato del Ejecutivo socialista.

Cazeneuve, que hizo un alegato contra los populismos en Francia, Europa y Estados Unidos y las falsas promesas a la población, no estaba obligado a someterse a la votación de la Asamblea Nacional, pero quiso pasar por ese trámite ante la necesidad de actuar “con una exigencia compartida”.

“Cada día cuenta para proseguir la acción en favor de la recuperación de Francia, de sus cuentas públicas, de su aparato industrial y productivo”, dijo el primer ministro, cuya labor al frente del Ejecutivo será la más breve de la V República. Bernard Cazeneuve, hasta ahora ministro de Interior, sustituyó como primer ministro a Manuel Valls, quien dimitió para dedicarse a su candidatura a las primarias de la izquierda y los ecologistas.

En su intervención, Cazeneuve, de 53 años, echó la vista atrás para defender el balance de este quinquenio de Gobierno socialista frente a las críticas de la oposición conservadora. “Estad orgullosos de lo que se ha hecho en los últimos cinco años”, dijo el jefe del Ejecutivo. - Efe