AMÁN/BEIRUT/LONDRES. Los rebeldes sirios y Rusia han llegado a un acuerdo para evacuar de Alepo a los combatientes opositores que aún permanecen en la zona este, los antiguos territorios controlados por la insurgencia, que prácticamente ha rendido la ciudad.

"Hubo negociaciones con Rusia ayer por la noche y lo primero que acordamos fue que los ataques aéreos pararían hoy, así que han cesado por la mañana", ha contado a Reuters Zakaria Malahifji, de Fastaqim, uno de los grupos opositores de Alepo.

Sin embargo, los combates sobre el terreno han continuado a lo largo del martes, por lo que las partes han negociado en las últimas horas una tregua completa para Alepo que entraría en vigor esta noche, de acuerdo con Malahifji.

El embajador ruso en Naciones Unidas, Vitaly Churkin, lo ha confirmado. "Según la última información, efectivamente se ha logrado un acuerdo para que los rebeldes abandonen la ciudad", ha dicho a los medios de comunicación desde Nueva York.

Churkin ha subrayado que la evacuación de la zona este de Alepo será solo de combatientes, explicando que no hay necesidad de que los civiles salgan porque ahora la parte oriental de la ciudad quedará bajo el control del Gobierno. "Nadie va a hacerles daño", ha asegurado.

Una fuente del Gobierno sirio ha detallado a la agencia de noticias británica que la evacuación de los rebeldes y sus familias hacia la zona de Siria que ellos decidan --en su mayoría Idleb-- comenzará a las 5.00 (hora local) del miércoles.

Sin embargo, el Consejo del Este de Alepo ha sostenido que la evacuación afectará también a los civiles. "No es la mejor solución, pero es la menos mala", ha confesado a los periodistas su presidente, Brita Hagi Hasán, desde París.

En la misma línea, una fuente del Gobierno de Turquía --que también ha participado en las negociaciones de este acuerdo-- ha insistido en que el desalojo será tanto para rebeldes como para civiles LA CAÍDA DE ALEPO

Churkin ha aprovechado para anunciar que Alepo volverá a manos del Gobierno en apenas unas horas, dando así por concluida la ofensiva del régimen sobre Alepo oriental, que se ha prolongado durante semanas y se ha saldado con cientos de muertos y miles de desplazados.

Las fuentes opositoras interrogadas por Reuters han cifrado en unas 50.000 las personas que aún quedan en la zona este. Al principio de la campaña militar lanzada por Damasco había unas 275.000, según datos de Naciones Unidas.

El Centro Ruso para la Reconciliación en Siria ha anunciado este martes que el Gobierno controla ya el 98 por ciento de Alepo. La oposición ha quedado recluida en una superficie de apenas tres kilómetros cuadrados, apunta la agencia de noticias Sputnik.

Por su parte, Amnistía Internacional (AI) tildó hoy de "crímenes de guerra" las ejecuciones extrajudiciales de civiles en el este de Alepo por parte de las fuerzas del Gobierno de Siria denunciadas por la ONU y pidió "protección" para los ciudadanos.

En un comunicado divulgado en su sede en Londres, AI hizo un llamamiento urgente a todas las partes involucradas en el conflicto a proteger a la población civil.

"Las denuncias de que civiles -incluidos niños- están siendo masacrados a sangre fría en sus hogares por las fuerzas del Gobierno sirio son profundamente impactantes, pero no inesperadas, dada su conducta hasta la fecha", afirmó Lynn Maalouf, directora adjunta de investigación de la oficina regional de Amnistía en Beirut.

Maalouf agregó que "esas ejecuciones extrajudiciales equivaldrían a crímenes de guerra".

"Durante el conflicto, las fuerzas del Gobierno sirio, respaldadas por Rusia, han desplegado repetidamente una cruel falta de respeto por la legislación humanitaria internacional y un profundo desprecio por el destino de los civiles", lamentó.

En la nota, apuntó que las fuerzas del Gobierno del presidente sirio, Bachar al Asad, "han tenido como objetivo de manera regular a los civiles como estrategia, tanto durante operaciones militares y mediante detenciones arbitrarias a gran escala, desapariciones y torturas, como con otros tratos vejatorios".

Al tiempo que las fuerzas del Gobierno de Siria se van haciendo con el control completo del este de Alepo, "el riesgo de que cometan nuevas atrocidades suscita graves temores sobre los miles de civiles que continúan atrapados", señaló la directora.

La organización también recuerda cómo en los últimos meses el mundo -incluido el Consejo de Seguridad de la ONU- ha contemplado "la matanza de civiles a diario" y cómo el este de Alepo ha sido reducido y transformado a una "fosa común".

Amnistía Internacional considero que "la inacción global frente a tal crueldad es vergonzosa" y que "la falta de responsabilidad por crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad ha permitido a las partes, particularmente a las fuerzas del Gobierno, cometer esos crímenes a escala masiva".

"Ahora es crucial que se desplieguen organismos de vigilancia independientes a fin de asegurar que se protege a la población civil y que se garantiza un acceso humanitario para que la ayuda pueda llegar a todos aquellos que la necesitan", dijo Maalouf.

AI denunció además que actualmente los heridos que se encuentran en el este de la citada ciudad siria no pueden ser evacuados y aquellos que intentan huir arriesgan sus vidas.

La organización pro derechos humanos instó a todas las partes del conflicto a que permitan a los civiles sirios, que quieran abandonar la zona de enfrentamientos, contar con un salvoconducto seguro para poder hacerlo.