MADRID. La Asociación Española de Pediatría (AEP) ha anunciado hoy que se pondrá en contacto con el sistema de atención pediátrico sirio para ofrecer su colaboración tras la muerte en un bombardeo del último pediatra que quedaba ejerciendo en la ciudad de Alepo.

Se trata del pediatra Mohammed Wasim Moaz, director del centro médico de Alepo bombardeado el pasado miércoles y que causó la muerte de al menos 27 personas, según ha recordado la AEP en un comunicado.

Ante esta noticia, los pediatras españoles han señalado que estudiarán con Siria distintas posibilidades de colaboración y han mostrado su solidaridad, apoyo y reconocimiento a todo el colectivo sanitario que desarrolla su labor en zonas de conflicto bélico.

Han subrayado la necesidad de garantizar la protección y asistencia a todos los niños que se ven envueltos en conflictos armados, en concreto a la población infantil siria, cuyo derecho a ser protegidos queda recogido en el artículo 22 de la Convención de los Derechos del Niño aprobado por la Asamblea General de la Naciones Unidas de 1989.

Han destacado que en que este tipo de situaciones es más necesario garantizar una atención pediátrica adecuada para evitar mayores sufrimientos a la población civil, por lo que "es irrenunciable" proteger también a los profesionales sanitarios que prestan servicio en áreas de conflicto y garantizar su seguridad.

La poliomelitis, el sarampión, infecciones bacterianas y parasitarias como pediculosis, escabiosis y leishmaniasis, infecciones respiratorias, tuberculosos o desnutrición aguda son solo algunas de las patologías que afectan a la infancia siria, han recordado los pediatras.