bruselas - Las autoridades de Bélgica, paralizada por los atentados de ayer en el aeropuerto de Zaventem y en el metro de Bruselas donde dos bombas estallaban en cada uno de ellos entre las 8 y las 9,11 de la mañana, dieron total prioridad a la asistencia a las víctimas, al tiempo que el Gobierno adoptaba medidas de seguridad adicionales y elevado la alerta terrorista al máximo en todo el país. El primer ministro belga, el liberal Charles Michel, pidió a la población “calma y solidaridad”, al tiempo que subrayó que “la prioridad es tratar a las víctimas”, que, según informaron el alcalde de Bruselas, Yvan Mayeur, y la ministra de Sanidad, Maggie De Block, ascienden a 34 muertos y 200 heridos.

“Lo que temíamos, ha ocurrido”, afirmó Michel en conferencia de prensa, en la que explicó que se han tomado medidas de seguridad adicionales tras elevar al nivel máximo la alerta terrorista en todo el país, como el despliegue de efectivos militares, el refuerzo del control en las fronteras y restricciones para el transporte público. Según informó la cadena de televisión pública francófona RTBF, el Gobierno belga ha reforzado con 300 militares las fronteras del país. Las fuerzas de seguridad continúan la investigación en los lugares de los atentados. Según el diario La Libre, en los ataques del aeropuerto de Zaventem se utilizaron varias bombas, dos de ellas en la sala de entrada, mientras que la cadena de televisión flamenca VRT apunta a que un tercer explosivo habría sido encontrado.

Según la agencia Belga, también se habrían encontrado otras armas en el aeropuerto, y otros medios indican que un fusil de asalto kalashnikov habría sido encontrado cerca del cuerpo de uno de los posibles atacantes-suicidas.

Mientras tanto, el país se encontraba paralizado, con los centros escolares cerrados y los estudiantes confinados en ellos hasta que las autoridades permitieran su salida, así como los transportes públicos de Bruselas, que están también suspendidos.

En Charleroi, a unos 60 kilómetros al sur de la capital, las autoridades locales decidieron también el cierre del servicio de metro, además de que las líneas de autobús regionales en dirección a Bruselas también se suspendieron.

Cerrado hasta las 05.00 de hoy En cuanto al aeropuerto internacional de Zaventem-Bruselas, en donde se produjeron dos atentados sobre las 08.15 horas (07.15 GMT), sigue cerrado hasta las 05.00 GMT de hoy, hora en que se prevé su reapertura. Los vuelos de ese aeropuerto fueron desviados a los regionales de Charleroi y de Lieja, así como a otros aeropuertos internacionales vecinos.

Por su parte, el Centro de Crisis de Bélgica pidió a todas las empresas de Bruselas que por el momento mantengan a sus empleados de los centros de trabajo. Este centro recoge y analiza las informaciones sobre riesgo de atentados y en función de esos datos las autoridades evalúan el nivel de alerta, que ayer se elevó al 4, el nivel máximo.

También se aconsejó a la población que no sobrecargue Internet y que limite la visualización de vídeos o música en streaming, y que no viaje a Bruselas, ni de noticias a través de las redes sociales o de mensajes de móvil con el fin de no saturar las líneas telefónicas.

En Bruselas, además se evacuó también la torre de Midi, el mayor rascacielos de la capital y que alberga la sede central de la oficina nacional de pensiones, después de que se hayan encontrado dos paquetes sospechosos en un aparcamiento subterráneo, informa la agencia Belga.

Otro paquete sospechoso llegó ayer a la prisión de Brujas, donde está detenido el presunto autor de la logística de los atentados del 13-N en París, Salah Abdeslam, pero finalmente resultó ser una falsa alarma, según indicó la policía de Brujas.

Además, en el barrio europeo, donde se ubican las instituciones comunitarias, la Policía establecía un perímetro de seguridad desde el parque del Cincuentenario hasta la estación de metro de Arts-Loi, contigua a la de Maalbeek, donde ocurrió uno de los atentados en un vagón del metro.

Las autoridades también cerraron el túnel que atraviesa el barrio comunitario y que termina en la calle de la Loi, en que se ubican edificios de las instituciones europeas y también de los diferentes ministerios belgas.

En las instituciones comunitarias y otros edificios de oficinas, las autoridades aconsejaron que los empleados no salieran de ellos, ya que si lo hacían no podrían regresar. Además, como medida de precaución, las autoridades decidieron la evacuación del personal no esencial de la central nuclear de Tihange (este del país), informó el jefe de Policía local de la localidad de Huy a la agencia Belga.

reivindicación del Estado islàmico El grupo terrorista Estado Islámico (EI) asumió la autoría de los atentados en Bruselas que causaron hoy al menos 34 muertos y 200 heridos, anunció la agencia de noticias Amaq, vinculada a esta organización yihadista, y un comunicado del grupo. En la nota, que no pudo ser verificada, la agencia señala que combatientes del EI “detonaron una serie de bombas, cinturones y aparatos explosivos, el martes, contra el aeropuerto y una estación de metro del centro de Bruselas, capital de Bélgica, un país que participa en la coalición internacional contra el Estado Islámico”. “Combatientes del Estado Islámico abrieron fuego dentro del aeropuerto de Zaventem, antes de que varios de ellos detonaran sus cinturones explosivos; además, un mártir detonó su cinturón explosivo en la estación de metro de Maalbeek”, precisó la nota, que añadió que los ataques causaron “más de 230 muertos y heridos”.

tres días de luto El Gobierno belga decretó tres días de luto por los atentados y está prevista la organización de un minuto de silencio a mediodía de hoy, mientras las banderas ondean a media asta en los organismos oficiales de todo el país y en las instituciones europeas. Ayer muchas personas acudieron a la Bolsa de Bruselas para protestar contra el terrorismo y mostrar su solidaridad con las víctimas, incluidos el primer ministro, Charles Michel, y el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker. Hoy hay prevista otra marcha de solidaridad en la capital. Michel, durante una comparecencia ante la prensa, se dirigió a los responsables de estos ataques, a quienes calificó de “enemigos bárbaros de la libertad y de la democracia”. - Efe