GINEBRA. En los puestos de frontera, las personas son filtradas de acuerdo a sus nacionalidades y sólo se permite la entrada de sirios, iraquíes y afganos, dijo el portavoz de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Adrian Edwards.
Relató que esta situación está aumentando las tensiones entre las miles de personas que se encuentran en las proximidades de la frontera sin poder avanzar en su periplo y que las bajas temperaturas suponen un riesgo adicional, particularmente para los niños.