BUDAPEST. Este nuevo espacio podrá acoger a entre 800 y mil personas y garantizará servicios de salud, agua potable y carpas para dormir, "pero no será un campamento para refugiados", señaló la alcaldía en un comunicado.
Los gastos de esta zona alcanzarían los 1,2 millones de euros y se construirá en la calle Verseny de Budapest, cerca de la estación de trenes Keleti.
Esta estación es escenario de protestas en los últimos días por parte de centenares de refugiados que quieren seguir rumbo a Alemania, pero la policía les prohíbe acceder a la terminal.
El lunes las autoridades húngaras dejaron subir a trenes con destino a Viena y Múnich a más de 3.000 inmigrantes, por lo que muchos decidieron intentar seguir el mismo itinerario y compraron billetes para ello.
Hoy centenares de refugiados protestaron ante la estación pidiendo que les autoricen partir hacia Alemania, sin que de momento se hayan producido incidentes.
La nueva zona anunciada por Budapest podría aliviar la situación en la estación Keleti, donde desde hace semanas viven centenares de refugiados, esperando poder seguir su viaje.
Las autoridades húngaras interceptaron en lo que va de año a más de 150.000 refugiados provenientes de países en conflicto, como Siria, Afganistán o Pakistán, y que en su gran mayoría quieren seguir hacia naciones más ricas de Europa.