Estado Islámico (EI) está reclutando a centenares de menores, que adoctrina, entrena en el uso de armas y despliega en el frente de una brutal guerra que sus moldeables mentes podrían no abandonar nunca. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) asegura que, en lo que va de año, EI ha reclutado a más menores que adultos en Siria, 400 niños frente a 120 adultos, que después usa en roles de combate y espionaje o como propaganda violenta. Según un informe de la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos Naciones Unidas (OACDH) del pasado noviembre, EI “da prioridad a los menores para asegurarse lealtad a largo plazo, adherencia a su ideología y una cantera de combatientes devotos que consideran la violencia como un estilo de vida”.
El OSDH considera que EI podría estar poniendo el énfasis en el reclutamiento de niños-soldados, esta misma semana dos gemelos de 16 años fueron detenidos con su familia en Badalona antes de viajar a Siria, por la facilidad de crear combatientes fanáticos entre los menores y ante las dificultades de seguir reclutando a extremistas adultos en otros países. Esta perversa estrategia se ha puesto de manifiesto con la divulgación de vídeos en los que niños aparentemente ejecutan a prisioneros de los yihadistas o en los que los muchachos se entrenan con rifles que casi les superan en estatura.
En el sistema educativo del “califato” de EI, los niños son adoctrinados en una interpretación fundamentalista del Corán, obligados a asistir a ejecuciones y a entrenarse con armas y en tácticas de guerra. Testigos han explicado a Naciones Unidas que en Al Raqa, ciudad siria que se ha convertido en capital de facto de EI, existen campos de entrenamientos para centenares de niños-soldado entre 5 y 16 años. “Con el uso de menores en roles de combate, EI ha violado la ley humanitaria internacional y perpetrado crímenes de guerra a una escala masiva”, explica el citado informe de la ONU. “EI es un régimen totalitario que pretende crear un nuevo ser humano, comenzando con los niños”, comenta a Efe Jessica Stern, coautora de ISIS: The State of Terror, un libro recién publicado en Estados Unidos sobre el grupo yihadista. Con el reclutamiento de niños y adolescentes, EI intenta adoctrinar seguidores fieles capaces de aplicar la violenta interpretación del Corán de la que hacen gala los extremistas suníes de EI, que controlan amplias zonas de Siria e Irak.
el poder de la imagen “Su objetivo es aterrorizar y horrorizar y, para ello, pocas cosas son tan efectivas como las imágenes de niños participando (en batallas, en ejecuciones o empuñando armas)”, opina Stern, profesora asociada de la Universidad de Harvard y experta en terrorismo internacional. La experta también señala que la participación de estos menores en la guerra del “califato” los convierte “indudablemente en víctimas, pero también en perpetradores”, algo que podría exponerles a represalias y les puede privar de la posibilidad de reintegración.
La tragedia de los niños de la guerra en cuatro años de conflicto en Siria, ahora extendido también a Irak, ha puesto al Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) frente a “una de la mayores crisis” a las que se ha enfrentado nunca, afirma en una entrevista Juliette Touma, portavoz para la crisis siria de esa agencia de la ONU. Touma asegura que “hay pruebas de que todas las partes implicadas en el conflicto reclutan de una forma u otra a menores, ya sea en puestos de control, como mano de obra o en el frente”, especialmente adolescentes de entre 12 y 18 años, aunque también existe un vídeo en Internet que muestra a niños de muy corta edad, de unos 8 años entrenados para convertirse en niños soldado, según ha denunciado la ONU.
Milicianos del grupo terrorista que lidera Abú Bakr al Baghdadi están utilizando cada vez con más frecuencia a menores de 18 años como terroristas suicidas, fabricantes de artefactos explosivos, informadores o escudos humanos para proteger sus instalaciones frente a los ataques de EEUU y la coalición militar que le apoya.
Desde que comenzó la guerra civil siria, la escolarización en el país ha pasado de más del 90% a rondar el 50%, mientras que en toda la región el organismo de la ONU estima que 14 millones de niños están en situación especialmente vulnerable. “Nuestro esfuerzo principal va dirigido a proveer la educación para que no se pierda una generación”, indica la portavoz de UNICEF, que trabaja para permitir que estos niños, que han perdido años de escolarización o sufren secuelas psicológicas, tengan una segunda oportunidad tras pasar por un conflicto sin final a la vista.
El Comité sobre los Derechos de la Infancia de Naciones Unidas ?ha denunciado, además, que los milicianos de EI en Irak venden, crucifican y entierran vivos a niños, entre otros abusos cometidos con menores. “Estamos realmente preocupados por los asesinatos y la tortura de estos niños, especialmente los que pertenecen a minorías pero no solo ellos”, asegura en un encuentro informativo Renate Winter, experta del Comité sobre los Derechos de la Infancia.
“El alcance del problema es enorme”, apostilla. Winter explica que entre las víctimas figuran niños de la secta yazidí, la minoría cristiana y también chiíes y suníes. “Tenemos informes sobre niños, especialmente los niños con discapacidades mentales, que han sido usados como terroristas suicidas, muy probablemente sin que lleguen a entenderlo”, explica Winter.