PEKÍN. Yeshi Khando, de 47 años y residente del condado de Ngangang (Sichuan, oeste de China y limítrofe con Tíbet), se acercó a un monasterio llamado Kardze en esa región el miércoles y se prendió fuego mientras gritaba proclamas como "el Tíbet necesita libertad", dice la organización Free Tibet (Tíbet Libre), con sede en Londres.
La religiosa también pidió que "regrese su santidad al Tíbet" cuando estaba envuelta en fuego, señala el grupo, en referencia al Dalai Lama, que lleva décadas en India.
El grupo Campaña Internacional por el Tíbet, con sede en Washington, también informó acerca del incidente, y ambos señalaron que la policía y personal de seguridad extinguieron las llamas y se llevaron a Yeshi Khando, por lo que se considera que sobrevivió.
Con el acto de Yeshi, Campaña Internacional por el Tíbet señala que 113 hombres y 24 mujeres se han inmolado o han intentando inmolarse (sobreviviendo a las llamas) desde marzo de 2011, aunque la mayoría murieron.
China asegura que el Tíbet es desde hace siglos parte inseparable de su territorio, mientras que los tibetanos argumentan que la región fue virtualmente independiente hasta que fue ocupada por las tropas comunistas en 1951 y denuncian represión por parte de Pekín.