Beirut - Los kurdos se muestran optimistas sobre el futuro de la localidad siria de Kobani, en la frontera con Turquía, tras los últimos avances de sus milicianos frente al grupo Estado Islámico (EI), cuando ayer se cumplió un mes de ofensiva yihadista, con más de 600 muertos.
“Confío en los esfuerzos de las Unidades de Protección del Pueblo kurdo, en sus hombres y mujeres, que darán hasta la última gota de sangre para proteger Kobani y acabar con los terroristas del EI”, afirmó el presidente de este enclave kurdo sirio, Anuar al Muslem después de que en los últimos dos días los radicales retrocedieran ante el aumento de los ataques de la coalición internacional, liderada por EEUU, y las operaciones de los kurdos.
Sin embargo, “los choques continuaban y ayer el EI lanzó una decena de proyectiles de mortero en distintas partes de la ciudad, con un mujer muerta y varios heridos. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos señaló por su parte que los yihadistas dispararon también un total de dieciséis cohetes contra el paso fronterizo entre Kobani y la vecina Turquía.
Un tercio, en poder del EI Pese al progreso de los kurdos por la periferia occidental y a que ayer recuperaron el control de una calle que conduce a un complejo gubernamental de seguridad, en manos de los extremistas, el EI todavía conserva entre el 25 y el 30% de la superficie de Kobani. Los combates dentro de la población se concentraron en las inmediaciones de dicho complejo y en un mercado de verduras, en poder del EI, en la mitad oriental.
El responsable de la defensa de Kobani, Esmat Sheij Hasan, explicó que la situación apenas ha cambiado. Tras sobrevolar varias veces la localidad esta tarde, los aviones de la coalición internacional atacaron posiciones de los radicales en los alrededores del recinto gubernamental de seguridad.