berlín. El Gobierno de Berlín elevó ayer el tono de su respuesta ante el posible espionaje a la canciller, Angela Merkel, y advirtió a Washington de que embajadas y diplomáticos en suelo alemán deben respetar la ley germana, que determina que las escuchas telefónicas son delito. La cascada de informaciones sobre las escuchas al teléfono móvil de Merkel durante más de una década desde la embajada estadounidense en Berlín, y con conocimiento al parecer del presidente estadounidense, Barack Obama, hizo reaccionar al titular alemán de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle. En un comunicado, el ministro subrayó que "en suelo alemán rige la ley alemana", una frase pronunciada ya por Merkel el pasado verano, pero dejó claro que esa máxima es válida para todos: "para alemanes y extranjeros, para ciudadanos y empresas, y también para diplomáticos y embajadas".
minar los lazos de unión El ministro Westerwelle, quien el jueves convocó al embajador estadounidense en Berlín -un gesto diplomático inédito entre los dos países-, confió en que Washington comparta ese punto de vista. "El espionaje entre amigos y aliados no es procedente", recalcó antes de añadir que, como se está comprobando, esas prácticas además "son políticamente muy perjudiciales". El espionaje, agregó, "amenaza con minar los lazos" que unen a los dos países y concluyó: "No todo lo que es técnicamente posible es también políticamente razonable".
El comunicado se hizo público después de unas duras declaraciones del ministro del Interior alemán, Hans-Peter Friedrich, quien resaltó en una entrevista al dominical Bild am Sonntag que "espiar es un delito y los responsables deben responder por ello", ya que supone violar la soberanía nacional. "Si los estadounidenses han pinchado teléfonos en Alemania, han infringido la ley alemana en territorio alemán", recalcó Friedrich, que ha sido duramente criticado por la oposición al dar por zanjado el debate del espionaje este verano tras viajar a Washington, cuando se publicaron informaciones sobre presuntas escuchas masivas de Estados Unidos a ciudadanos germanos, gobiernos e instituciones europeas.
espiada este mismo verano Sus palabras acompañaban las nuevas revelaciones sobre el espionaje al móvil de Merkel. Citando fuentes de los servicios secretos de Estados Unidos, el Bild am Sonntag señaló ayer que Barack Obama fue informado de las escuchas por el director de la Agencia de Seguridad Nacional, en 2010. Según el dominical, la NSA no sólo espió el móvil del partido que usó la canciller alemana hasta el pasado mes de julio, sino que este mismo verano los espías norteamericanos realizaron nuevas acciones de espionaje sobre la Angela Merkel, según parece desde la embajada de Estados Unidos en Berlín.
Estos detalles completan la extensa información publicada por el semanario Der Spiegel, que indica que el móvil de Merkel aparece en la lista de objetivos de la NSA desde 2002, tres años antes de que ganara las elecciones.