praga. La República Checa vivió ayer un "terremoto político" debido a las elecciones generales anticipadas, con una victoria agridulce de los socialdemócratas, la llegada al Parlamento de dos nuevos movimientos de protesta y el descalabro del centroderecha. El Partido Socialdemócrata CSSD, liderado por Bohuslav Sobotka, se situó primero en las urnas con el 20,5% de los votos, 1,6 puntos porcentuales menos que hace tres años, de acuerdo con el escrutinio del 99,9% de los sufragios.
Le sigue de cerca el nuevo partido populista ANO 2011, del magnate Andrej Babis, segfundo hombre más rico del país, quien consiguió un 18,6% de los apoyos en su primera participación en unas elecciones.
Los terceros más votados son los comunistas del KSCM con el 14,9% de los sufragios (3,6 puntos más que hace tres años), por delante del hasta hace poco gobernante TOP 09 liberal, con el 12,0%, 4,7 puntos menos que en 2010.
del gobierno al 7,7% Los grandes perdedores fueron los conservadores del ODS, en el Gobierno hasta junio, que bajaron del 20 al 7,7%, castigados por un escándalo de corrupción que hizo dimitir a su Ejecutivo en junio de este año.
Otros dos partidos entran en la cámara: la hasta ahora extraparlamentaria KDU-CSL democristiana (6,8%) y el nuevo grupo populista Alborada de Democracia Directa, del senador y empresario de origen japonés Tomio Okamura (6,9 %).
El reparto de escaños que sigue a estos comicios -con una participación del 59,5%, tres puntos menos que en 2010- complica mucho la formación de alianzas, lo que no son buenas noticias para un país que tuvo una última legislatura con empate técnico entre la oposición izquierdista y el centroderecha gobernante. La socialdemocracia consigue 52 diputados, cuatro menos, mientras Babis se estrenará con 48 escaños, con lo que ambos partidos alcanzan juntos la mitad de los 200 asientos del Parlamento. Los comunistas, que lo tendrán difícil para ser aceptados como posible socio de Gobierno, contarán con 34 escaños, cantidad insuficiente para dar siquiera apoyo tácito a un Ejecutivo minoritario del CSSD. "Queremos formar Gobierno y empezar las negociaciones con otros partidos, aunque es una Asamblea muy atomizada y nos esperan discusiones difíciles, pero asumimos el desafío", señaló socialdemócrata Sobotka.
La difícil posición negociadora de Sobotka se acentuó al no entrar en la cámara el segundo partido socialdemócrata, el SPOZ del presidente checo, Milos Zeman, que sólo obtuvo 1,5% de los votos, muy lejos del umbral del 5% necesario.
Además, están las afirmaciones del ganador moral, Andrej Babis, quien aseguró ayer que su objetivo es "evitar la llegada de una izquierda con el apoyo de los comunistas".