WASHINGTON. Zimmerman, vigilante urbano voluntario de 29 años y de origen hispano, fue absuelto el sábado de todos los cargos que se le imputaban porque en febrero del año pasado acabó con la vida del joven negro de 17 años Trayvon Martin con un disparo en la ciudad de Sanford, en Florida.
"Nunca creí que no fuera culpable", ha indicado la madre, Sybrina Fulton, en declaraciones a la cadena ABC. "Mi primer sentimiento fue de impresión y disgusto", ha reconocido al saber sobre su absolución. La madre ha recordado que su hijo era un adolescente cuando murió y que estaba asustado, "por lo que puedes no saber qué hacer" al verte amenazado.
Los padres no critican a los jurados, ya que respetan su decisión al "salirles del corazón" al asegurar que Zimmerman se defendió de los ataques de Martin. "Pero no creemos que sea justo y por supuesto, fue devastador", han asegurado. "Sólo quiero que hubieran tenido la oportunidad de conocer a Trayvon y que pusieran en contexto su decisión", ha apostillado la madre.
El padre ha indicado que "no hay ganador en esta situación". "Obviamente, estamos más dolidos", pero "continuamos rezando para encontrar la paz y la fuerza para ser unos padres que demos el perdón", ha asegurado. El progenitor ha reclamado que la sociedad estadounidense debe conocerse más para no considerar que "alguien es sospechoso sólo porque no le conoces".