Nuakchot. El presidente mauritano, Mohamed uld Abdel Aziz, fue evacuado ayer a París en un avión ambulancia tras haber recibido el sábado varios balazos de un soldado cuando regresaba a Nuakchot.

La versión oficial, ofrecida anteayer por el ministro de Comunicación Hamdi uld Mahjoub, señaló que el presidente fue tiroteado "por error" por un militar de su propia escolta. Uld Mahjoub aseguró que el estado de salud del presidente es "bueno", tanto que pudo entrar en el hospital por su propio pie.

Sin embargo, otros medios como Tawary o Al Akbar, aseguran que Abdel Aziz recibió varios balazos, uno de ellos en el abdomen, lo que pondría en duda la tesis de una "bala perdida".

Poco antes de partir a Francia, Abdel Aziz, de 57 años apareció en la televisión pública de su país, con semblante cansado pero sereno, para tranquilizar a los mauritanos y decirles que "las cosas van bien" y que "no hay razón para inquietarse".

Mohamed uld Abdel Aziz no informó que iba a ser trasladado al extranjero y la cámara de la TV oficial tuvo mucho cuidado de no mostrar más que su cara y la parte superior del torso cubierto por una sábana.

"Agradezco a los médicos por la intervención quirúrgica que acabo de pasar", expresó el presidente en su breve declaración hecha desde un Hospital Militar cuyos accesos permanecieron bloqueados ayer durante toda la noche y primeras horas de la mañana.

NORMALIDAD EN EL PAÍS La capital de Mauritania, Nuakchot, amaneció ayer con la aparente normalidad de cualquier domingo y la población continuó con sus actividades habituales.

Abdel Aziz tiene por costumbre pasar los fines de semana en una hacienda que posee a unos cien kilómetros al norte de Nuakchot, en su región natal, y todo parece indicar que regresaba de ese lugar cuando fue alcanzado por los disparos de un militar del que no se conocen más detalles. Más allá de la lacónica declaración del portavoz del Gobierno y la del propio presidente quedan muchas preguntas en el aire sobre las circunstancias exactas del suceso.