Bamako. La junta militar que gobierna Mali, tras el triunfo del golpe de estado del pasado 22 de marzo, alcanzó ayer en Bamako un acuerdo-marco con la Comunidad Económica de Estados del África Occidental (Cedeao), para salir de la crisis política que atraviesa el país. Según este acuerdo, el jefe de la junta militar, el capital Amadou Haya Sanogo, permanecerá como presidente de Mali hasta que el titular de la Asamblea Nacional, Dionkouda Traore, asuma el poder, para dar comienzo a un periodo de transición que desembocará en unas elecciones.
Una vez que el Traore asuma la presidencia, algo que podría ocurrir en las próximas horas o en los próximos días, la junta y Sanogo dejarán el poder, pero no serán procesados. "Hemos alcanzado un acuerdo que permitirá en las próximas horas o días constituir de manera efectiva los organismos previstos en la Constitución y que funcionarán de manera regular", dijo a la prensa el ministro de Exteriores de Burkina Faso, Djibrill Bassolé. Asimismo, agregó que el presidente de Costa de Marfil, Alassane Ouattara "va a tomar inmediatamente las medidas oportunas para levantar las sanciones adoptadas contra Mali" por la Cedeao, que impuso un embargo a la junta para forzarla a restaurar el antiguo orden constitucional. Asimismo, Bassolé, que actúa como mediador en la crisis, agregó que la Cedeao ha pedido a la junta militar que permita al depuesto presidente, Amadou Toumani Touré, residir en una vivienda de su elección y que se le garantizarle la seguridad. Según el acuerdo, el presidente de la Asamblea Nacional, que asumirá el poder de acuerdo con la Constitución, permanecerá a la cabeza del estado durante 45 días.