el cairo. Al menos 25 personas fallecieron ayer en Siria, la mayoría en los bastiones opositores de Idleb (norte) y Homs (centro), en nuevos ataques de las fuerzas leales al régimen de Bachar al Asad contra los civiles, según un grupo opositor. Los Comités de Coordinación Local denunciaron en un comunicado que el incidente más sangriento se produjo en Idleb, donde las fuerzas se seguridad atacaron un autobús y mataron a nueve de los pasajeros.

Esa provincia fue, además, escenario de enfrentamientos entre el ejército y militares desertores, que se desarrollaron en Yisr al Shugur. Según el recuento del grupo opositor, un total de diez personas perecieron en Idleb y otra decena en Homs, mientras que el resto de víctimas se repartieron entre la localidad de Jasem, y Madamia, en los alrededores de Damasco.

En Homs, la ciudad más afectada por la represión del régimen desde el inicio de la revuelta contra Al Asad, se escucharon fuertes explosiones en el barrio de Al Bayada.

Asimismo, en el barrio de Bab Amro, el estallido de una bomba de clavos causó un gran número de heridos, la mayoría mujeres y niños que estaban comprando pan.

hermano de un activista Entre los muertos de Homs figura el hermano del activista Jaled Abu Salah. Mientras, en las localidades de Zabadany y Madaya, en los alrededores de Damasco, los tanques del ejército reiniciaron sus bombardeos contra las viviendas de civiles justo después de que se marchara de esa zona la misión de la Liga Árabe. Los observadores siguen trabajando sobre el terreno, pero su presencia no ha logrado que cese la violencia en Siria, donde según la ONU han muerto más de 5.000 personas desde marzo y unas 400 desde que comenzó la misión hace casi un mes.

Por otro lado, el Ejército Libre Sirio (ELS) negó ayer que haya un acuerdo para la creación de un Consejo Militar Supremo, encabezado por el general desertor Mustafa al Cheij, tal como habían anunciado fuentes cercanas a este oficial. "Nos sorprendió esa noticia, porque el general Al Cheij, desde su deserción, no se ha unido todavía al ELS, aunque lo hayamos acogido entre nosotros", dijo el "número dos" de la milicia rebelde, Malik Kurdi.