bruselas/argel. La OTAN efectuó en la madrugada del martes su ataque más intenso sobre Trípoli desde el comienzo de su campaña en Libia, en un movimiento que coincide con los llamamientos de Francia y Reino Unido en favor de una intensificación de los esfuerzos contra el régimen de Muamar Gadafi. Los bombardeos sobre Trípoli fueron muy duros y, según la cadena de televisión qatarí Al Yazira, se escucharon al menos doce potentes explosiones en la capital.
Algunas de ellas, en la zona de Bab el Aziza, donde se encuentra el complejo presidencial de Gadafi. Según el portavoz del régimen libio, Musa Ibrahim, los ataques dejaron al menos tres muertos y 150 heridos.
Ibrahim dijo que los aviones de la Alianza efectuaron entre 12 y 18 ataques contra barracones de voluntarios del Ejército libio, que estaban vacíos, y aseguró que se produjeron víctimas entre los civiles que vivían en las proximidades.
Fuentes de la OTAN aseguraron que estos ataques fueron los "más intensos" efectuados por la organización sobre un área en concreto desde el inicio de las operaciones.
Oficialmente, la OTAN confirmó sólo el ataque en Trípoli sobre un almacén de vehículos militares situado en los alrededores de la residencia del dictador. Según la Alianza, esa instalación es conocida "por haber estado activa durante la represión de la población en febrero de 2011 y haber seguido siendo utilizada desde entonces para el aprovisionamiento de las fuerzas del régimen que llevan a cabo ataques contra civiles inocentes".
Fuera de la capital, la OTAN explicó que en sus últimas operaciones destruyó un almacén de municiones y un centro de comando y control en las inmediaciones de Sirte, ciudad natal de Gadafi. Además, las bombas aliadas golpearon un centro de mantenimiento de equipos militares cerca de Sebha y dos piezas móviles de artillería en las afueras de Misrata. En total, los aviones aliados condujeron 149 salidas, 52 de las cuales de tipo ofensivo.
El teniente general canadiense Charles Bouchard indicó en un comunicado que "las fuerzas de Gadafi siguen siendo una amenaza para los civiles" y aseguró que la Alianza seguirá "atacando objetivos que se utilizan para llevar a cabo esa violencia". El refuerzo de las operaciones aliadas llega inmediatamente después de que el martes Londres y París reclamasen públicamente una intensificación de las acciones contra Gadafi.