Roma. Los ministros del Interior de España, Francia, Chipre, Grecia y Malta publicaron ayer una declaración conjunta para pedir a la Unión Europea (UE) la creación de un "fondo especial de solidaridad" en el que participen todos los países miembros y obtener así "los recursos necesarios" para afrontar la avalancha de inmigrantes que podría llegar a las costas europeas ante las revueltas que vive el norte de África. El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, se reunió ayer en Roma con el ministro de Interior italiano, Roberto Maroni, para tratar la crisis migratoria que vive la isla de Lampedusa ante la oleada de inmigrantes clandestinos llegados a sus costas y mantuvo poco después un encuentro con sus homólogos de Francia, Chipre, Grecia, Malta e Italia para presentar una posición común ante la UE en el Consejo de ministros de Interior que se celebrará hoy en Bruselas.

La idea es crear "un sistema europeo de asilo común y sostenible antes de 2012" y "programas específicos para traducir en la práctica la solidaridad" de los países europeos. Según explicó Maroni, la posición de los países del Mediterráneo es la de acoger "a todos aquellos que tienen el estatus de refugiado" y "repatriar a los inmigrantes que no pidan el asilo como máximo en 18 meses".

Los países mediterráneos, reza la declaración, exigen que la Unión Europea apruebe "medidas urgentes" para afrontar "la ola de inmigrantes y refugiados que a través del Mediterráneo llegan a nuestras costas" sobre todo ante "los profundos y dramáticos cambios institucionales y sociales" que sufre el norte de África. Estos países consideran que la crisis que han vivido países como Túnez o Egipto y que ahora ha surgido en Libia "podría generar flujos incontrolados de inmigrantes clandestinos" a Europa, lo que "crearía consecuencias graves y riesgos potenciales para la seguridad interna de la Unión Europea". La seguridad en Europa "y su estabilidad", han recordado los ministros, constituyen "un objetivo que debe ser perseguido con determinación" y han advertido de que Europa "no puede permitirse quedarse sin iniciativa ante la crisis de una región" que es "vital para su futuro".

cifras La agencia de fronteras exteriores de la Unión Europea (Frontex) cree que pueden llegar a los países de la UE entre 500.000 y 1,5 millones de personas a causa de las revueltas en Libia y el norte de África. "Se trata de personas de origen subsahariano que trabajan en Libia y el norte de África" y que "se dirigirían principalmente a Italia, Malta y Grecia".

En los últimos años, esta agencia que cuenta con el personal y recursos (helicópteros y embarcaciones, principalmente) que voluntariamente le prestan los Estados miembros, "tiene la necesidad de triplicar su capacidad operativa".

Los ministros de Interior de la Unión Europea se reunirán hoy en Bruselas para debatir las demandas de la cuenca mediterránea y, en su caso aportar fondos aunque aún no se sabe en qué cantidad.