singapur. Un Airbus A380 de Qantas aterrizó ayer de emergencia en Singapur tras sufrir un fallo de motor después del despegue y durante el vuelo desde Singapur a Sidney, según confirmó el propio fabricante del superjumbo, a partir de los informes preliminares. El avión fue entregado a Qantas el 19 de septiembre de 2008 y había acumulado alrededor de 8.165 horas de vuelo. Impulsado por cuatro motores Rolls-Royce Trent 900, tuvo que regresar al aeropuerto de Singapur de donde había despegado tras detectar el fallo, aterrizando sin problemas y sin que se produjeran heridos. En el avión viajaban 440 pasajeros y 26 tripulantes a bordo. Foto: efe