MOSCÚ. "El número exacto de los afectados se está precisando", indicó Marina Grídneva, portavoz oficial de la Fiscalía General de Rusia.

Aproximadamente la mitad de los heridos están graves, dijo la ministra de Sanidad, Tatiana Gólikova.

Para su traslado a las clínicas de San Petersburgo y Moscú fueron trasladados a la zona de la catástrofe varios helicópteros y un avión sanitario, que operan desde el aeropuerto de Jatílovo.

Fuentes del Ministerio de Emergencias precisaron que aún "podría haber personas" bajo los escombros de los vagones.

Sin embargo, el levantamiento de escombros fue detenido para no dificultar la investigación de lo ocurrido, que corre a cargo de varios grupos de agentes de la Fiscalía, la Policía Ferroviaria, el Ministerio del Interior y el Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB).

La Fiscalía General anunció la instrucción de causa de acuerdo con los artículos 3/205 (Atentado terrorista) y 222 (Tráfico ilegal de explosivos) del Código Penal de Rusia.

Por el momento no se precisa a quién podría pertenecer la autoría del posible atentado, dijo la portavoz de la Fiscalía.

Fuentes de la investigación informaron de que en el lugar del accidente fue hallado un cráter de un metro de diámetro que podría haber sido creado por una explosión.

"Aproximadamente, la explosión se produjo bajo el noveno vagón.

La potencia de la carga por ahora se desconoce", dijo una de ellas a la agencia rusa RIA-Nóvosti.

Este sería el segundo atentado terrorista contra el "Nevski Express" en poco más de dos años. El 13 de agosto de 2007 un atentado con explosivos provocó el descarrilamiento del "Nevski Express".

Aquel ataque terrorista dejó 60 heridos y causó daños valorados en unos 240 millones de rublos, más de 10 millones de dólares al tipo de cambio de entonces.

Al mismo tiempo, tanto entonces como ahora hay quien pone en duda la versión terrorista de estos accidentes.

Varios expertos destacaron que el descarrilamiento de anoche pudo ser resultado de "un defecto del raíl o de la presencia de un objeto extraño en la vía".

En cuanto al estallido que precedió al descarrilamiento, según los testigos, los especialistas recordaron que el "Nevski Express" está equipado con frenos magnéticos que, en caso de frenado de emergencia, "emiten un ruido bastante fuerte, que podría ser confundido con una explosión".

Otra posible causa del accidente, relacionada con el corte de electricidad poco antes del accidente, quedó descartada por los expertos, ya que no afectó a los equipos ferroviarios.

Expertos ferroviarios también ponen en duda la versión de que el accidente de 2007 fue un atentado terrorista.