El presidente de la Cámara, Gregorio Rojo, hace balance de la situación de las empresas alavesas este año, cómo ven el próximo año y reitera el apoyo que se les ofrece desde la Cámara para hacer frente a los desafíos en tema de internacionalización, la diversificación de su cartera de clientes, la digitalización y la sostenibilidad.

¿Cómo se ve desde la Cámara de Álava la situación económica del territorio y qué previsiones se manejan de cara a terminar el año?

De acuerdo con el dinamismo que viene demostrando la economía española durante los últimos trimestres, la Cámara de Comercio de España ha revisado al alza sus previsiones de crecimiento tanto para el conjunto del año 2024, como para 2025. En concreto, para el conjunto del presente año se espera un avance del PIB del 2,4%, que podría ralentizarse hasta el 2,0% en 2025. En cualquier caso, se trata de previsiones sujetas a notable incertidumbre dada la volatilidad del entorno en el que se desenvuelve la actividad económica global.

En el caso de nuestro territorio, y debido a que somos eminentemente exportadores, se está notando cierta desaceleración motivada por la caída de exportaciones en países clave como Alemania y EEUU. Esto está provocando la caída de la cartera de pedidos de nuestras empresas, provocando cierta incertidumbre en lo que resta de año y principios del 2025. Un enfoque integrado que combine aumento de la productividad y gestión prudente de la deuda pública sería recomendable para garantizar un crecimiento económico robusto y sostenible. El principal riesgo sigue procediendo del ámbito geopolítico, particularmente en caso de empeoramiento de las crisis en Ucrania y Oriente Medio.

¿Cuáles son los principales retos que enfrenta el tejido industrial y cómo está trabajando la Cámara para ayudarles a superarlos?

El sector industrial se sigue enfrentando retos como la internacionalización, la diversificación de su cartera de clientes, la digitalización y la sostenibilidad. En todos ellos, la Cámara en colaboración con la Diputación Foral de Álava y con el departamento de Industria del Gobierno Vasco, ponemos a disposición de las empresas alavesas programas y herramientas destinadas a ayudarlas con estos 4 retos.

¿Están preparadas las empresas para un entorno marcado por tanta incertidumbre?

Aunque muchas empresas en Álava tienen experiencia en manejar entornos inestables, la actual situación es excepcionalmente desafiante. La Cámara trabaja para fortalecer la resiliencia empresarial mediante la capacitación, el apoyo en la digitalización y la búsqueda de nuevas oportunidades en mercados internacionales. Con el Front Desk Internacional como centro de información y asesoramiento, se han atendido numerosas consultas, lo que demuestra que las empresas están buscando herramientas y recursos para afrontar la incertidumbre global.

La sostenibilidad es cada vez más prioritaria, ¿qué iniciativas se han impulsado para fomentar prácticas empresariales sostenibles en el territorio?

Hemos sido pioneros, por ejemplo, en lanzar la Oficina de Sostenibilidad, con el objetivo de informar y asesorar a la empresa alavesa en todo lo relativo a como le va afectar y que puede hacer, de cara a trabajar este nuevo concepto dentro de su empresa. Además, hemos creado el Club de sostenibilidad en el que participan las 25 principales empresas de Álava. Se trata de un foro, donde las empresas comparten buenas prácticas, se favorece el networking y nos ayuda, a que eso que las empresas grandes ya están haciendo porque el mercado se lo demanda, poco a poco, se lo hagamos llegar a la pyme porque le acaba llegando. También hemos puesto en marcha en colaboración con la Diputación de Álava, un curso de experto en sostenibilidad, totalmente gratuito, para formar a personas, que luego puedan liderar estos procesos de sostenibilidad en las empresas alavesas.

¿Qué acciones ha tomado la Cámara para apoyar a las empresas en la búsqueda y formación del talento local?

La Cámara ha consolidado programas como el PICE, que incluye formación tanto presencial como en streaming para jóvenes, y ha desarrollado iniciativas para conectar a los jóvenes con el mundo empresarial. Esto incluye ferias de empleo y talleres de formación que permiten a las empresas acceder a un talento bien preparado y motivado. Además, se están llevando a cabo programas de emprendimiento para jóvenes que fomentan su conexión con el mundo empresarial. Seguimos asimismo gestionando las becas Global Trading del Gobierno Vasco, de cara a que nuestros jóvenes puedan tener una primera experiencia laboral internacional, y que después de esos meses, vuelvan a Álava con una experiencia contrastada y puedan optar a los puestos y perfiles que demandan nuestras empresas.

¿Qué programas de formación o colaboración con instituciones educativas está promoviendo la Cámara?

La Cámara continuará ofreciendo una amplia gama de programas de formación semestrales en áreas clave como competencias directivas y gestión comercial. Esta formación se desarrolla principalmente en nuestras aulas pero cada vez más in company, en los centros de trabajo de las empresas.

¿Cómo está contribuyendo la Cámara a que las empresas de Álava se digitalicen y modernicen sus procesos productivos?

La Cámara está ofreciendo asesoría y formación en herramientas digitales, así como programas de apoyo para la integración de nuevas tecnologías en los procesos productivos. Además, facilitamos la conexión con expertos en transformación digital para acompañar a las empresas en este proceso. La Oficina de Transformación Digital ha proporcionado 291 asesoramientos individuales y también hemos impulsado el programa eus-COMMERCE, logrando que numerosas empresas alavesas avancen en su transformación digital. Además, se gestiona el programa Kit Digital para facilitar el acceso a herramientas tecnológicas.

¿Qué previsiones maneja la Cámara para el desarrollo económico de Álava de cara a 2025, especialmente en términos de innovación y sostenibilidad?

La Cámara tiene una visión positiva, destacando la importancia de la innovación y la sostenibilidad como pilares fundamentales para el crecimiento. Con el apoyo adecuado, creemos que Álava puede convertirse en un referente en la implementación de prácticas empresariales sostenibles y en la atracción de inversión en sectores innovadores. Las empresas alavesas han demostrado en el pasado ser resilientes y estoy seguro de que, con el apoyo adecuado, saldrán fortalecidas una vez más.