Un agente de la Ertzaintza fuera de servicio ayuda en la detención de un hombre borracho que estaba intentando acceder a un establecimiento

Agentes de Policía Local detuvieron en la tarde del viernes a un varón de 28 años como presunto autor de un delito de atentado a agentes de la autoridad. Los hechos sucedieron alrededor de las 17:30 horas cuando una patrulla que realizaba labores de seguridad ciudadana fue requerida por la Central de Coordinación para que se dirigiera a un establecimiento comercial de la calle Portal de Betoño ya que un varón embriagado se encontraba molestando a los clientes, al personal y al vigilante de seguridad de dicho local.

A su llegada al lugar, los agentes fueron informados por este último de lo sucedido. Al parecer, minutos antes no le había permitido el acceso ya que pretendía entrar con una botella de cristal de una bebida alcohólica. Entonces, el varón, en actitud desafiante y agresiva, blandió la botella para amenazarlo e insultarlo sin parar. Con la ayuda de un agente de la Ertzaintza fuera de servicio consiguieron sacarlo del establecimiento. Los agentes procedieron a identificarlo y cachearlo y durante la intervención, no sólo hizo caso omiso a sus continuos requerimientos para que abandonara el lugar sino que arremetió contra ellos y les lanzó un teléfono móvil por lo que hubo de ser finalmente detenido.  

Rocía con spray al propietario de un establecimiento

Por último, la Policía Local ha detenido el pasado viernes por la noche a un varón de 45 años sobre el que pesaba una requisitoria judicial y como presunto autor de un delito de lesiones.Los hechos ocurrieron sobre las 20:30 horas cuando una patrulla que realizaba labores de seguridad ciudadana por el barrio de Coronación fue requerida, a su paso por la confluencia de la calle Portal de Arriaga con plaza Santo Domingo, por un varón que manifestaba haber sido rociado en la cara con un spray de defensa por un cliente en su establecimiento comercial de la calle Tenerías tras haber tenido una discusión. Los agentes se dirigieron al local, donde seguía el varón y lo identificaron y se entrevistaron con él para aclarar lo ocurrido. Al chequear su documentación comprobaron que tenía pendiente una requisitoria de un Juzgado de Vitoria interesando su búsqueda, detención y presentación, por lo que procedieron a ejecutarla.