Los trabajos destinados a ampliar las zonas de depósito de residuos y minimizar el impacto ambiental de Gardelegi avanzan. La Junta de Gobierno Local adjudicó en su reunión semanal de ayer la segunda fase de las obras de presellado en el vertedero gasteiztarra, que requerirán una inversión de 1,09 millones de euros a las arcas municipales.
Según destacó el concejal responsable de Modelo de Ciudad, Urbanismo, Vivienda, Limpieza y Medio Ambiente, el socialista Borja Rodríguez, estas labores permitirán dar “continuidad” a los trabajos realizados con anterioridad en Gardelegi, que se centraron en una porción del vertedero de 35.000 metros cuadrados.
La UTE conformada por Yárritu y FCC Medio Ambiente ha sido la seleccionada para ejecutar estas obras necesarias para el correcto sellado provisional de las zonas inactivas del actual depósito controlado de residuos no peligrosos.
El proyecto y la obra darán respuesta al presellado de Gardelegi, una necesidad que viene definida en la Autorización Ambiental Integrada vigente para el vertedero vitoriano y los requerimientos formulados por la viceconsejería vasca de Medio Ambiente. En palabras de Rodríguez, estos trabajos buscan tanto “ampliar zonas de vertido” en Gardelegi, “minimizar el impacto ambiental del vertedero y crear nuevas infraestructuras de control ambiental”.
Tres empresas concurrieron al proceso de licitación convocado para ejecutar las obras, pero tras el proceso de análisis y valoración de los técnicos municipales la concesión ha recaído en la plica de Yárritu-FCC Medio Ambiente. La UTE tuvo la mejor puntuación (81,5 puntos) y presentó además la mayor rebaja económica en el precio de los trabajos.
La propuesta de la firma adjudicataria plantea además una reducción de seis meses en el plazo de ejecución de estos trabajos. De esta forma, de los 12 meses estipulados y previstos en el pliego de condiciones iniciales los trabajos lograrán estar finalizados en seis meses.