¿Sintió vértigo al conocer su designación como candidata? ¿Se lo pensó antes de dar el paso?
–Claro que me lo pensé y mucho, además. Ha sido una decisión muy meditada en la hay en juego muchas variantes, tanto profesionales, políticas y personales. Todas las decisiones de esta índole que afectan a mi familia las comparto y consensúo. Si la gente a la que yo quiero no me apoyara en estas decisiones, sería imposible afrontar estos retos tan complicados. Fue una decisión meditada, trabajada.
Gorka Urtaran deja una cartera de proyectos e inversiones ya en marcha para los próximos años.
–Durante estos ocho años el alcalde Urtaran ha trabajado de una forma intensa y dedicada. Su pasión es Gasteiz, como lo ha demostrado. Esas inversiones irán germinando a lo largo de la próxima legislatura. Gorka y yo tenemos el mismo ideario y defendemos lo mismo. Por ese lado, unanimidad y consenso absoluto pero cada uno tenemos nuestro estilo. Él tiene una forma de hacer las cosas y yo tengo otra. Hay que aunar esa continuidad con aportación de nuevas ideas y es de lo que se trata.
“Soy una mujer normal, trabajadora, a veces un poco cabezona, pero que sabe escuchar”
¿Cuál es ese ‘estilo Artolazabal’?
–Soy una mujer dialogante, de escucha, valiente pero que trabaja de forma colaborativa y eso, creo, que es una seña de identidad que en mi etapa en el Gobierno Vasco he demostrado y ejercido. Hemos establecido esa reciprocidad entre todos los agentes a la hora de poner en marcha los proyectos. Tengo un recorrido profesional que avala la capacidad de poder liderar equipos importantes y tengo esa experiencia de globalidad, que puede ser valioso para afrontar los retos de Gasteiz. Me definiría como una mujer normal, trabajadora, a veces un poco cabezona pero que sabe escuchar. Por encima de todo defiendo a mi equipo. Si no tengo un equipo leal en el que confíe al cien por cien no voy a poder reaizar el trabajo.
Después de más de 40 años de democracia Gasteiz va a tener una alcaldesa. Ha costado mucho llegar a este punto.
–Por fin Gasteiz va a estar liderada por una mujer. Todavía en el ámbito de la igualdad quedan muchos pasos por dar. Las mujeres debemos estar en los lugares donde se toman las decisiones estratégicas para la puesta en marcha de proyectos. Sinceramente, creo que llegamos un poco tarde. Las sociedades más igualitarias son las más avanzadas y en las que las mujeres tenemos el mismo papel que los hombres a la hora de aportar. La igualdad no es ir en contra de nadie, sino que es ir al lado de alguien. En ese papel los hombres son agentes activos de forma decidida para conseguir la igualdad. Será además Gasteiz el primer Consistorio de las tres capitales vascas liderado por una mujer y eso es algo de la seña de identidad del futuro de Vitoria.
Las encuestas vaticinan una dura y cerrada pugna entre el PNV y EH Bildu por la Alcaldía.
–Las encuestas son herramientas que marcan tendencias. Primero hay que ganar unas elecciones y luego ver con qué fuerza cada opción política ve avalada su gestión. Tenemos que ser capacces de contar con gobiernos fuertes para tomar decisiones importantes. No me fío de las encuestas y creo que iremos viendo si vamos convenciendo a más personas a decantarse con el modelo del PNV, frente al de la izquierda abertzale. El modelo del PNV aporta seguridad, establidad, confianza, tranquilidad, acuerdo y certezas frente a otro basado en aventuras, populismo e incertidumbre y basado en la negación. A la ciudadanía le tocará decidir entre el modelo del PNV y el de la izquierda abertzale. Tenemos como PNV un recorrido contrastado, muy alejado de lo que ofrece la izquierda abertzale.
Cómo ve al resto de sus rivales en la carrera electoral.
–No me atrevería a definirlas porque no las conozco con tanta profundidad como para opinar sobre ellas. Son mujeres que van a ser mis contricantes en la campaña electoral. Desde el punto de vista político somos ideologías y propuestas diferentes, pero desde el punto de vista personal espero que sea una campaña respetuosa y donde podamos opinar, compartir, discutir y confrontar modelos. A lo largo de la campaña las iré conociendo y durante la legislatura también. A la hora de trabajar y llegar a acuerdos durante una legislatura, las relaciones personales buenas facilitan mucho ese trabajo. Por mi parte, es lo que ofrezco a las candidatas.
