Las obras para reformar la gruta de la Florida han llegado a su fin tras una inversión de alrededor de 450.000 euros. El popular espacio del céntrico parque, que en Navidades recobrará su protagonismo acogiendo el nacimiento del Belén gasteiztarra, registraba episodios de filtraciones y riesgo de derrumbe, lo que obligó al Ayuntamiento a clausurarlo y acometer esta intervención.

Aprovechando las obras se han llevado a cabo mejoras en la iluminación, con nuevos proyectores ‘led’ incluidos, la accesibilidad a la gruta, la salubridad y la decoración del espacio. Para acometer la rehabilitación fue necesario demoler la antigua gruta.

"Vamos a poder disfrutar de una nueva gruta más segura, accesible y amplia durante estas Navidades. Y además, sin perder su esencia”, ha explicado el alcalde, Gorka Urtaran, en una visita realizada a la obra este martes junto al concejal de Movilidad y Espacio Público Raimundo Ruiz de Escudero, y a la concejala de Cultura, Estíbaliz Canto.

UNA VUELTA A LOS ORÍGENES

El renovado aspecto del pasadizo recuerda a la gruta original de 1905. La cueva gana en altura y anchura y se ha naturalizado incorporando más vegetación. Además las paredes presentan un aspecto rugoso que imita la textura de la original. La fachada también luce renovada y busca recuperar la estética original de 1905, así como los dos miradores elevados (con barandilla de seguridad) y la cascada.