Parar el ciberacoso está en tu mano- Zibererasoak gelditzea zure eskua. Es el eslogan de la nueva campaña promovida por los institutos de Igualdad y Juventud de Navarra para concienciar sobre la ciberviolencia en las plataformas en línea. La iniciativa cumple una doble finalidad: la prevención de este tipo de conductas y la sensibilización ante las agresiones derivadas del uso de Internet, así como del consumo de las redes sociales. El público al que se dirige son adolescentes y jóvenes, principalmente.

Según la subdirectora de Ciudadanía, Empoderamiento y Participación de las Mujeres del Instituto Navarro para la Igualdad (INAI), Marian García, este sector de la población está atravesando un periodo de "alta vulnerabilidad, cuando la relación con sus semejantes es primordial para su desarrollo social y afectivo". Este mensaje se divulgará en las redes sociales o social media y reforzará con carteles distribuidos en centros educativos, escuelas de idiomas y equipos de atención y servicios municipales de igualdad.

"El surgimiento de la ciberviolencia se está convirtiendo en un problema universal en auge y con consecuencias significativas a las que urge dar respuesta", añadido el vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior, Javier Remírez. Así pues, el responsable ha recalcado que esta campaña pretende poner el foco en el perfil mayoritario de las víctimas del ciberacoso: las mujeres y las niñas.

El ciberdelincuente es un varón entre 26 y 40 años, de nacionalidad española y presuntamente implicado en fraudes informáticos, coacciones, amenazas y delitos de índole sexual

INAI está trabajando en el tratamiento de diversas formas de violencia online contra personas del colectivo LGTBI+, adolescentes, mujeres y niñas. Se pretende poner en marcha acciones de difusión, prevención y sensibilización, además de formación a profesionales y de coordinación con otros organismos que desempeñen su labor en ámbitos como la migración, la coeducación, la convivencia o la juventud.

También se prevé instruir a las mujeres víctimas y supervivientes de Navarra en materia de ciberacoso y en las estrategias de defensa mediante el fomento de sus competencias digitales. Este planteamiento coincide con el propósito de mejorar la reacción ante las violencias sexuales en la Red y ofrecer atención integral a las mujeres víctimas. Se llama, por tanto, a la responsabilidad y a hacer un uso igualitario y respetuoso de las redes sociales al margen de la violencia machista.

En líneas similares, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de Navarra registraron un total de 4.465 hechos delictivos relacionados con las tecnologías de la información y las comunicaciones durante el pasado año. Esta cifra representa un incremento del 39,1% de la ciberdelincuencia en la Comunidad Foral en comparación con 2019, superior a la media estatal, de acuerdo con el VIII Informe sobre Cibercriminalidad elaborado por la Dirección General de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad.

La información recogida desde 2016 confirma, por tanto, que la ciberdelincuencia es un conflicto en auge y que "aumenta progresivamente su peso proporcional dentro del conjunto de la criminalidad". En 2016, los más de 92.000 hechos denunciados simbolizaron el 4,6% del cómputo general de los delitos, mientras que los 288.000 registrados en 2020 representaron el 16,3%.

Los ciberdelitos en Navarra en 2020 fueron estafas informáticas (87,4%), amenazas y coacciones por Internet (5,9%), y falsificación informática (2,7%)

Combatir delitos

Para hacer frente a esta situación, el Comité Ejecutivo de Coordinación (CECO) del Ministerio de Interior dio luz verde en febrero de este 2021 al Plan Estratégico contra la Criminalidad. A fin de combatir eficazmente esta modalidad delictiva se contemplan cinco áreas: detección, prevención, protección, respuesta y persecución, al igual que la adecuada atención a las personas perjudicadas.

En Navarra, por tipología penal, los ciberdelitos notificados durante 2020 se clasifican del siguiente modo: 3.903 fueron estafas informáticas (el 87,4%), lo que equivale a un promedio de 10,66 fraudes diarios. Le siguen las amenazas y coacciones efectuadas a través de Internet (264 casos), que suponen el 5,9%, y los delitos de falsificación informática (123), el 2,7% restante.