Euskadi cerró agosto con un superávit de 108 millones de euros, equivalentes al 0,14 % del producto interior bruto (PIB) de la comunidad autónoma, según los datos de ejecución presupuestaria publicados este lunes por el Ministerio de Hacienda.

El pasado año, el País Vasco registraba sin embargo al término de agosto un déficit de 239 millones de euros que representaba el 0,33 % de su PIB.

Euskadi es una de las siete comunidades autónomas que cerraron agosto con superávit junto a La Rioja (39 millones de euros, el 0,41 % del PIB), Asturias (81 millones, el 0,32 %), Baleares (93 millones, el 0,30 %), Andalucía (303 millones, el 0,17 %), Canarias (65 millones, el 0,14 %) y Aragón (48 millones, el 0,12 %).

Por el contrario, una decena de comunidades autónomas terminaron con déficit el pasado mes de agosto, con Murcia a la cabeza en porcentaje del PIB (1,52 %) y la Comunidad Valenciana en cifras absolutas (1.667 millones de euros).

También registraron déficit al término de agosto Castilla-La Mancha (659 millones de euros, el 1,43 % del PIB), Navarra (123 millones, el 0,55 %), Cataluña (1.352 millones, el 0,54 %), Extremadura (77 millones, el 0,34 %), Cantabria (17 millones, el 0,11 %), Castilla y León (67 millones, el 0,10 %), Madrid (179 millones, el 0,07 %) y Galicia (49 millones, el 0,07 %).

Destaca el Ministerio de Hacienda que el conjunto de las administraciones autonómicas registra un déficit en agosto de 2022 de 3.983 millones, lo que equivale al 0,30 % del PIB, frente al superávit del 0,10 % alcanzado en agosto de 2021, y que este resultado obedece a un aumento de los gastos del 9,4 %, mientras los ingresos crecen a un ritmo del 5,6 %.

Esta diferencia tan significativa entre ambos periodos, añade, se debe, principalmente, a que la liquidación definitiva del sistema de financiación de 2020 ha tenido un resultado neto negativo para las comunidades de alrededor de 3.200 millones de euros, mientras que la liquidación de 2019 tuvo un efecto neto positivo de 8.983 millones.

En este sentido recuerda que, derivada de esta situación extraordinaria, se ha implementado una transferencia desde el presupuesto del Estado a las comunidades por dar cobertura financiera al saldo global negativo de la liquidación de 2020, que asciende a 4.404 millones y que corresponde a la suma del saldo neto negativo de las Comunidades.

Un dato que aporta el departamento que dirige María Jesús Montero es que, entre los gastos, la remuneración de asalariados crece un 3 % debido al incremento salarial del 2 % fijado para 2022, frente al 0,9 % de 2021.

Las transferencias sociales en especie se elevan en un 5,8 % hasta los 21.782 millones, el gasto en conciertos de asistencia sanitaria se incrementa en un 2,8 % y el correspondiente a conciertos educativos lo hace en un 3,2 % y la inversión crece en un 4,7 % respecto a 2021 y alcanza los 9.327 millones.