- El sindicato LAB instó ayer a “obstaculizar” la aplicación en Euskadi y Nafarroa de la nueva reforma laboral y abogó por negociar con las patronales un acuerdo intersectorial sobre trabajo “digno” en materia de salarios, jornada y “garantía de empleo”. La secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, lamentó que las organizaciones empresariales de Euskadi, Confebask, y Nafarroa, CEN, no hayan contestado a las propuestas que en ese sentido les ha hecho llegar el sindicato y ha censurado que la patronal “se encuentra muy cómoda con el marco estatal”.

Ante ello, LAB tratará de “aunar fuerzas” en defensa de su planteamiento, para lo cual va a solicitar una reunión con ELA. También va a promover encuentros con EH Bildu y PNV, formaciones que han votado en contra de la reforma laboral pactada en el ámbito del diálogo social estatal, así como con representantes de los Gobiernos vasco y navarro.

LAB propone un acuerdo en Euskadi y Nafarroa que fije el salario mínimo en 1.400 euros al mes, reduzca la jornada laboral a 30 horas semanales, limite las jornadas parciales, adopte medidas para superar la brecha salarial de género y establezca la indemnización por despido improcedente en 45 días de salario por año trabajado, entre otras medidas.

Eventuales acuerdos en estas materias se alcanzarían entre sindicatos y patronal, pero los gobiernos tienen que mantener “una actitud proactiva” en defensa de lo que se pacte, ha indicado Aranburu, quien ha afirmado que “no excluyen” a CCOO y UGT en este proceso.

La dirigente sindical se mostró de acuerdo con los partidos que han considerado que en la reforma laboral aprobada por el Gobierno “ha cedido al chantaje de la patronal” y, tras indicar que en Euskadi el Gobierno Vasco lleva años haciendo políticas “a favor de la patronal”, consideró que “ha llegado el momento de romper esa simbiosis”.