2021 ha terminado con un cambio de tendencia y el último trimestre del año ha roto el ascenso en la confianza de los vascos que se había registrado de marzo a septiembre del año pasado. Según el Estudio de Confianza de los Hogares Vascos realizado por el departamento de Estudios de Laboral Kutxa, el año se cierra en valores neutros (0).

La cooperativa de crédito achaca la perdida de confianza de los vascos durante los últimos meses del año a la aparición de la variante ómicron que ha generado un aumento de contagios y más incertidumbre ante la posible imposición de restricciones. A la situación epidemiológica se ha sumado el incremento de los precios, y la falta de epecattivas claras ha provocado que los vascos tengan una peor percepción de la marcha de la economía general, que vuelve a ser negativa (-8), aunque se mantiene el optimismo respecto a la reducción del empleo (10).

Los hogares vascos anticipan que se va a producir un importante crecimiento de los precios. De hecho es el indicador más negativo (-64) del estudio, lo que provoca que empeoren las previsiones sobre la economía del hogar (-9), que no ha llegado a ser positiva en ningún momento de 2021. Sin embargo, los vascos tienen una mejor percepción de su capacidad de ahorro (8).

De la misma forma, empeora la percepción de los hogares sobre el momento actual para realizar grandes compras (-21), las expectativas de realización de estas grandes compras se deterioran (-4). Y en el lado contrario, mejora, aunque de forma muy leve, la expectativa de compra de viviendas y de vehículo, dentro de una cierta atonía.

En definitiva, el estudio de Laboral Kutxa concluye que los factores de incertidumbre impactan en las expectativas de los hogares, que apostarán por el ahorro hasta que llegue un escenario más claro y con menos interrogantes.