- El presidente de Seat y Cupra, Wayne Griffiths, pidió ayer al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ir “mano a mano” entre administración y sector, con un proyecto concreto y con objetivos a corto y a medio plazo, no solo a largo. En una entrevista de Europa Press justo al cumplirse un año al frente de la compañía, en el Automobile de Barcelona que se celebra en Fira de Barcelona, Griffiths defendió “ir al grano ahora y ser muy concreto y poner estrategias en marcha”, así como compartir los planes para que puedan ir adaptando su respuesta.
Así, sostuvo que está bien marcarse objetivos a largo plazo, como el de tener 3 millones de coches eléctricos en 2030, pero advirtió de que nadie “va a estar en el puesto donde está ahora” cuando esto llegue.
“Entonces hay que decidir qué queremos hasta el final de este año, qué queremos tener el año que viene, y qué tiene que aportar cada uno para hacer esto. Nosotros, los coches; las instituciones, el sistema de subvencionar y ayudar el coche al principio; y las instituciones y las empresas energéticas, la infraestructura”, indicó. Griffiths recordó que su objetivo sigue siendo fabricar coches eléctricos en la planta de Martorell (Barcelona) en 2025 pero avisó de que depende de que haya las condiciones económicas que lo hagan factible: “Y esto depende del Perte” (Proyecto Estratégico de Reactivación y Transición Económica) del sector del coche.
“Nosotros hemos mostrado nuestro interés de participar en el Perte como Seat y Grupo Volkswagen. Éste va a ser una parte muy importante para que se pueda tomar ese tipo de decisión”, afirmó. Añadió que la compañía del grupo Volkswagen está trabajando en ello con el Gobierno y espera que se concrete a finales de este año porque “es la base para luego tomar la decisión”.
Sin embargo, Griffiths advirtió de que hay otro escenario a tener en cuenta, que es el del nuevo reglamento Euro 7 y qué cambios va a suponer y cómo de factible va a seguir viendo coches de combustible.